Hoy en día, dominar la cilindrada de los 125 c.c. es prácticamente reinar en nuestro mercado. Los scooters y motocicletas de esta cilindrada son los más vendidos desde que entrara en vigor la convalidación entre los carnés de coches y motos (B=A1) y muchos usuarios, hasta el momento poco o nada interesados en los vehículos de dos ruedas, tuvieran fácilmente acceso a ellos.
A pesar de los cambios en el mercado, siempre ha habido un claro dominador en los listados de ventas: el Honda SH 125i. El scooter del ala dorada ha reinado a placer, incluso cuando dejó de ser un scooter de 100 c.c. de pequeño tamaño y relativamente económico. A los fieles seguidores del rueda alta de Honda no les ha importado ni el incremento de precio ni que su montura no cumpla con requisitos que se exigen a otros modelos, como, por ejemplo, que se pueda guardar un casco integral bajo el asiento.
Posibilidad de cambio
Alternativas en su misma categoría existen, pero ninguna, hasta el momento, parece estar bien posicionada para destronar al SH. Yamaha, la eterna rival de Honda, parece haber hallado una fórmula que puede dar sus frutos. El nuevo Xmax, un modelo más trabajado y más actual que su predecesor, nos brinda todo lo que le falta al SH, aunque eso sí –al menos de momento– a un precio algo superior.
El Xmax 125i lo tiene todo para triunfar. Uno de sus principales argumentos es su excelente comportamiento, gracias a un robusto bastidor sumamente reforzado, ya que inicialmente debía dar réplica a un motor con el doble de cilindrada. Esto posibilita que la parte ciclo del Xmax 125i pueda ir verdaderamente sobrada cuando tiene que interactuar con el monocilíndrico 4T LC SOHC 2V de exactamente 124,6 c.c. y 14 CV de potencia. Sus prestaciones, aunque son muy destacables para un scooter de su categoría (sobre todo en lo que se refiere a velocidad punta), no son suficientes para que el chasis, un doble cuna, se vea en apuros.
Esta estructura fabricada en acero está, por si no fuera suficiente, perfectamente apoyada por un apartado de suspensiones de más alto nivel, con una horquilla telehidráulica de gran recorrido (110 mm) y dos amortiguadores posteriores, detrás, de 95 mm de carrera.
En conjunto, aunque no habría que olvidar las llantas de 15” delante y 14” detrás, con neumáticos Michelin Gold Standard de 120/70 y 140/70 respectivamente, le confiere un comportamiento simplemente excelente, en el que cabría destacar su extraordinaria estabilidad en cualquier circunstancia. A pesar de su volumen y peso (173 kg según Yamaha), el Xmax es un scooter muy ágil debido a su bien equilibrada y portentosa parte ciclo, ya que en esta versión del octavo de litro presenta un reparto de peso más equitativo entre ambos trenes que su hermano mayor de 250 c.c.
Fiabilidad total
Con el Xmax nos sentiremos a gusto y seguros en cualquier circunstancia. Obviamente, en recta su estabilidad está fuera de toda duda, pero lo más gratificante es que en curva el feeling con el scooter no disminuye lo más mínimo. El tren anterior demuestra una gran solidez, pisa con firmeza y nos traslada con precisión lo que hace la rueda delantera. La horquilla, a pesar de ser básicamente la misma, ha recibido algún que otro retoque para que su hidráulico se comporte de forma más consistente que en la criticada versión anterior. Detrás, los dos amortiguadores continúan ofreciendo un nivel de confort excelente, aunque, eso sí, sin comprometer lo más mínimo su funcionamiento que, como de costumbre, continúa siendo muy bueno.
Para rematar está la acertada parte ciclo, Yamaha confía en el mismo sistema de frenos que su hermano mayor, aunque con algunos retoques, como por ejemplo la pinza del freno trasero; mientras que en el Xmax 125i es una Brembo de dos pistones opuestos, en el dos y medio se opta por una de pistones paralelos. Con todo, los discos de 267 y 240 mm le vienen que ni pintados para aumentar la sensación de seguridad y de control sobre el scooter. En cuestión de potencia, el freno posterior parecía incluso superar a su homónimo anterior, aunque en lo que se refiere a tacto, en los dos casos obtendremos la máxima precisión a la hora de dosificar la frenada.
Muy por encima
El motor, pese a su calidad, no tiene el potencial suficiente para encontrar los límites de la parte ciclo que lo acompaña. Los 14 CV que esgrime el Yamaha no bastan para ponerla en apuros, pero sí para ofrecernos una variedad de uso poco corriente en un 125 c.c.
El Xmax 125i es algo más que un scooter urbano, aunque sobre todo mecánicamente es el medio en el que mejor se encuentra, y por su confort de marcha y protección aerodinámica es capaz de circular por carretera o vías rápidas en bastante buenas condiciones. El propulsor tiene un desarrollo muy largo, lo que le proporciona unas aceleraciones y recuperaciones muy suaves, pero, por otro lado, le permite establecer una velocidad de crucero donde muchos scooters del octavo de litro tienen su velocidad punta.
Gracias a ello podremos plantearnos trayectos de relativamente largo recorrido. Por ejemplo, resulta muy apropiado para todos aquellos usuarios que, al vivir fuera de los grandes núcleos urbanos, necesitan recorrer distancias considerables a diario para desplazarse a sus puestos de trabajo. Ésta no suele ser la labor de un scooter de la cilindrada del nuevo Xmax, pero por diseño y potencial, el scooter de los diapasones es perfectamente capaz de realizarla.
Lo bueno del Xmax es que, aunque el aspecto dinámico está realmente bien trabajado, no descuida para nada su faceta práctica, ya que, al fin y al cabo, no deja de ser un scooter. Como tal, su funcionalidad es máxima, explota de manera especial aspectos como la capacidad de carga, que en esta nueva versión ha sido francamente mejorada. El principal argumento en este apartado es, como desde el primer día, el amplio cofre bajo asiento, cuya capacidad es perfecta para dar cobijo a dos cascos integrales y algo más, ya que se ha ganado un poco más de espacio en esta edición.
Un elemento muy optimizado respecto a sus antecesores ha sido la guantera, pues ha duplicado su volumen (ahora ocupa prácticamente todo el contraescudo) y continúa teniendo su correspondiente cerradura. También hay que destacar el nuevo cuadro de instrumentos, más moderno, variado, completo y vistoso que el del Xmax anterior, que, como en su caso, lo hereda del dos y medio, aunque con alguna variación, concretamente, el rango del cuentavueltas.
Tmax réplica
Técnicamente se han mejorado muchas cosas, pero es exteriormente donde el nuevo Xmax deja muy claro que se trata de una nueva versión. Aunque continúa siendo un 125 de buen tamaño, su carrocería se ha compacto y estilizado bastante; lógicamente, su línea se ha modernizado, y para ello, qué mejor fuente de inspiración que un scooter con solera y buena prensa como el Tmax 500. Muchos ven el Xmax como un Tmax a escala y, salvando las diferencias, no es del todo incierto.
Frontalmente se ha reducido bastante el tamaño, el escudo es más compacto y el parabrisas ha perdido unos centímetros de superficie. También se han obviado detalles como los protectores de manos que había frente a los puños, lo que de forma global parece haber restado un poco de protección aerodinámica al Xmax 2010.
Desde el puesto de conducción, el Xmax ofrece una mayor sensación de calidad y lujo, los acabados son exquisitos y se ha cuidado hasta el más mínimo detalle para que dicha sensación sea aún más intensa. Las fibras encajan milimétricamente, incluso en los puntos donde se combinan varios tipos de ellas, además, la agradable suavidad y baja rumorosidad mecánica no hacen más que aumentar el efecto de que nos encontramos sobre un 125 c.c. de gama alta.
Las muchas horas de trabajo y la calidad de los materiales utilizados en la creación y desarrollo del nuevo Xmax son, por sí mismas, una clara prueba de la calidad y total garantía de buenos resultados, pero al mismo tiempo son también directamente responsables de su elevado precio de 4.049 euros.
No cabe duda de que es uno de los scooters del octavo de litro más caros del momento, pero si lo pensamos bien, su hermano mayor también lo ha sido en su categoría y, la verdad, no ha sido impedimento para que se corone como el dos y medio más vendido de nuestro mercado. ¿Logrará trasladar Yamaha este éxito a la cilindrada de los 125 c.c.? El tiempo lo dirá…
A favor
Suavidad de funcionamiento
Comportamiento en curva
Cuadro de instrumentos
Capacidad de carga
Calidad neumáticos
En contra
Potencia freno delantero
Espacio plataforma
Precio elevado
Aceleración
Ficha técnica
Motor |
|
Motor tipo |
Monocilíndrico 4T LC SOHC 2V |
Cilindrada |
124,6 c.c |
Diám. x carrera |
52,0 x 58,6 mm |
Rel. compresión |
11,2:1 |
Alimentación |
Inyección electrónica |
Arranque |
Motor eléctrico |
Encendido |
Electrónico digital CDI |
Embrague |
Automático centrífugo en seco |
Cambio |
Variador automático |
Transmisión |
Por correa trapezoidal |
Parte ciclo |
|
Tipo chasis |
Doble cuna en acero de sección redonda y chapa estampada |
Geometrías |
N.d. |
Basculante |
Grupo motopropulsor oscilante |
Susp. delantera |
Horquilla telehidráulica de 110mm |
Susp. trasera |
2 amortiguadores de 95 mm de recorrido, ajustables en precarga |
Freno delantero |
Disco de 267mm, pinza 2 pist. |
Freno trasero |
Disco de 240 mm pinza 2 pist. |
Tipo frenada |
Convencional |
Neumáticos |
120/70 x 15" y 140/70 x 14" |
Largo total |
2.220 mm |
Altura máxima |
1.337 mm |
Ancho total |
776 mm |
Distancia ejes |
1.545 mm |
Altura asiento |
775 mm |
Peso declarado |
173 kg |
Guía del comprador |
|
Precio |
4.049 euros |
Garantia |
2 años |
Importador |
Yamaha Motor España |
Tel. |
93 703 15 00 |