Yamaha X-Max 250 Executive, aún más exclusivo

Yamaha X-Max 250 Executive, aún más exclusivo

T-Max 530 y X-Max 250 son la punta de lanza de Yamaha en un mundo del scooter que en la actualidad está dominado por modelos de corte económico, equipados con lo justo y con unos precios muy por debajo de lo que se estilaba hace sólo unos años. Lo verdaderamente importante hoy en día es que el scooter en cuestión cueste poco; nada o casi nada importa ya que disponga de un gran equipamiento o su tecnología sea de última generación.

Ante este panorama no se puede decir que los T-Max y X-Max se encuentren precisamente en la situación más propicia, ambos, independientemente de la cilindrada en que militen, son considerados scooters de gama media-alta, por lo que en un principio sus ventas deberían haberse desplomado en estos últimos tiempos. Pero nada más lejos de la realidad, los dos se han mantenido bastante bien, incluso en el caso del T-Max, que domina su segmento con mano de hierro. Tampoco le han ido mal las cosas al T-Max 250 que hoy probamos, pues es uno de los dos y medio más vendidos, y en el segmento de scooters GT de gama media, donde ha de enfrentarse a modelos de hasta 300 cc, se sigue manteniendo entre los mejores.

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Posiblemente, una de las claves de por qué Yamaha ha logrado mantener en tan buen estado de forma el X-Max en sus diferentes cilindradas ha sido que no ha dejado de incluir pequeñas mejoras. En sus escasos tres años de vida desde la última remodelación en profundidad, el X-Max ha recibido bastantes versiones y novedades que si bien es cierto que no lo han cambiado radicalmente, sí que han conseguido actualizarlo poco a poco hasta el punto de poder abrir nuevos sectores, a la búsqueda de nueva clientela. Actualmente, aparte del modelo de serie o los ABS, podemos escoger entre tres versiones: la más deportiva o con estética más agresiva es el X-Max Sport; el X-Max Momo Desing, inspirado y diseñado por el famoso fabricante de accesorios y ropa deportiva del mundo del motor, y, por último, nuestro invitado de hoy, el nuevo X-Max 250 Executive, que, como su nombre indica, se centra en la mejora de su estética y en la optimización de su capacidad de carga.

Esta versión Executive, más equipada, está disponible en las cilindradas de 125 y 250 cc

Como resulta lógico, el X-Max es básicamente el mismo scooter; su excelente parte ciclo, con un apartado de suspensión comodísimo y un sistema de frenada supereficaz (también estará disponible en la versión ABS), se mantiene. Lo mismo sucede con su potente pero a la vez suave y progresivo motor, que, aunque en las fotos que acompañan a este artículo podéis ver que llega con una cola de escape Akrapovic, en realidad se trata de una opción más que se paga aparte del kit Executive que os detallamos a continuación.

Kit muy completo

Posiblemente, el Executive es uno de los kits más prácticos y mejores de cuantos nos ofrece Yamaha. Por un lado, nos proporciona un top case posterior de 39 litros que, junto al habitáculo que hay bajo el asiento con capacidad para dos integrales, nos obsequia con una capacidad de carga increíble. Además, para mayor comodidad de su propietario, la cerradura del baúl y el cláusor es la misma, por lo que no tendremos que andar con un manojo de llaves exagerado en el bolsillo de la chaqueta.

Otros aspecto muy práctico, aunque no muy utilizado por la mayoría de los usuarios, es la toma de corriente de 12V que ahora equipa, que podremos utilizar para cargar el móvil o cualquier otro equipo electrónico mientras nos desplazamos de un lado a otro; eso sí, siempre y cuando se puedan guardar dentro de la guantera donde está ubicada. Para terminar con el apartado funcional, también destaca la incorporación de un nuevo parabrisas que, pese a parecer a primera vista muy similar al de serie, tiene una altura un poco mayor para protegernos mejor del viento, o del frío y la lluvia en invierno.

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Aprovechando la ocasión, el departamento de diseño de Yamaha también ha querido dejar su impronta en el nuevo Executive, diseñando una serie de adhesivos plásticos de gran grosor y con estética y tacto muy parecidos a los de la fibra de carbono, un buen detalle para diferenciarlo más si cabe del X-Max de serie. Estos adhesivos los encontraremos en los laterales del guardabarros anterior, el escudo y el túnel central, y sobre estos últimos se ha serigrafiado la palabra Executive, que da nombre a esta transformación.

Por último, el asiento también recibe un nuevo tapizado, con un tejido antideslizante como el X-Max estándar, aunque para ofrecer una imagen de mayor calidad en sus costuras se ha empleado hilo rojo que delimita de forma perfecta su silueta.

Los Yamaha X-Max con el kit Executive ya están disponibles en vuestro concesionario más cercano, y como no podía ser de otro modo, podréis elegir entre la versión 125 que costará 4.199 euros y otra con ABS a 4.699 euros, y en la cilindrada de cuarto de litro, entre el modelo con frenada convencional, por 4.799 euros, y el dotado con ABS, por 5.299 euros.

Nos gustó

  • ““Además del espacio para dos cascos que hay bajo el asiento, ganaremos 39 litros más de capacidad gracias al baúl con cerradura única incorporado”.
  • Dinámicamente, el X-Max se mantiene entre los mejores de su clase, sobre todo en lo que se refiere al comportamiento de su chasis y suspensiones”.
  • Además de poseer una estética algo diferente, la capacidad de carga se ha visto claramente mejorada con el nuevo top case”. 

A mejorar

  • No se trata de un modelo realmente nuevo, sino de una nueva versión mejorada con algunos de los elementos opcionales”.
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