La superventas Yamaha MT-07 es todo un logro de moto: conjuga facilidad de conducción, gracias a un logrado chasis, con un motor que empuja a cualquier régimen, consiguiendo una gran versatilidad y todo eso a un precio muy ajustado.
Pero para el preparador Andrew Stagg aun se le podía sacar
más juego a la Yamaha y decidió convertirla en supermotard.
Lo primero que hizo fue recortar el subchasis para hacer otro atrtesanal, que permitiera subir e asiento. Bajo éste colocó el depósito de 9 l, mientras que en la ubicación original de éste ocultó todo el sistema eléctrico.
En cuanto a las suspensiones, son unos 20 mm más largas que
las originales.
Hablando del falso depósito, tanto éste como el resto de piezas, están hechas en aluminio y de manera artesanal.
Se ha recorrido a la industria auxiliar para los complementos. Así, el manillar es Rizoma, los frenos son unos Gilles Tooling, y los intermitentes provienen de Motogadget.
Se ha montado la instrumentación digital original, pero en
una ubicación distinta a la habitual.
En la placa porta-números frontal se han insertado un par de
faros, uno para cada haz de luz, y ambos usando tecnología LED.
En cuanto al motor, monta unos de filtros de papel de K&N
y un nuevo sistema de escape diseñado por Black Widow.
La moto está a la venta en Bike Cicles.
