Aparecida en 2005, la Yamaha MT-01 rebosaba personalidad, aunque en la marca de Iwata eran conscientes de que no sería una moto de masas. La primera de la saga MT montaba en enorme bicilíndrico en V de la XV 1700 Midnight Star, potenciado hasta 95 CV y con nada menos que 17 kgm de par.
Casi 16 años después, los preparadores austríacos de Titan Motorcycles la transforman en la Yamaha MT-01 Blue Falcon, una mezcla entre scrambler, bobber y moto post-apocalíptica.
Se prescindió rápidamente de la parte trasera, y se substituyó por un subchasis de aluminio completamente cubierto con un asiento de cuero artesanal, con un pequeño piloto trasero de LED.
El faro delantero es redondo y también de LED Kellermann y un manillar de LSL. La instrumentación es de Motogadget, reducida a la mínima expresión. Los intermitentes, de Rizoma, están insertados en los extremos del manillar.
La bestial MT-01 monta llantas de radios con unos Pirelli Scorpion Rally, que le confieren un aspecto todavía más salvaje.
También se han cambiado muchas piezas originales por otras hechas a mano. La pintura también se ha personalizado.
La moto es el encargo de un cliente que pidió una “off-fighter de aspecto brutal”. Sin duda la Yamaha MT-01 Blue Falcon lo es.
Bestial. Estaria bien que hicierais una prueba con una de origen. A los poseedores nos encantaría.