El sábado 15 de abril se celebró el sexto Rally Lambretta Club Castelló, un encuentro reservado para aficionados al scooter eterno rival de las Vespa.
Todos los poseedores de un scooter Lambretta tuvieron su punto de reunión en Castelló, en la Comunitat Valenciana, donde disfrutarían de un fin de semana especial.
La concentración empezó con un desayuno en la sede del Club de Castelló; allí fueron llegando numerosos participantes que iban aparcando sus scooters en batería, que dio lugar a la esperada foto.
En este mismo lugar hubo la recogida de credenciales y se entregaron las bolsas con los regalos pertinentes que acompañaban la inscripción al evento.
Así, mientras se esperaba a la llegada de más Lambrettas, se pudo disfrutar de un café y un bizcocho, así como de la típica Barretxa local (una bebida alcohólica mezcla de moscatel y anís).
Ya con el estómago calentito, a las 9:15 el grupo de scooters partió de Castellón hacia Borriol, la Pobla, Tornesa y Cabanes llegando a la ermita de San Cristófol donde se pudo disfrutar de un desayuno más completo (dos bocadillos, café y bebida), y disfrutando de unas vistas muy bonitas.
El sexto Rally Lambretta Club Castelló reunió a una cincuentena de scooters
A continuación, el grupo de Lambrettas salió hacia Barona, Vilafamés, San Juan de Moró y Mas de Flors (es una pedanía donde vive un pintor de fama mundial de Castellón, que se llama Ripollés, donde hace todas sus obras de arte), para luego subir a Alcora, Artesa y Ribesalbes. Una vez llegaron al término de Alcora pusieron rumbo al pantano de Sichar.
Desde allí el grupo descendió hacia Vila Real, a la ermita de la Mare de Déu de Gracia donde se realizó una nueva parada de avituallamiento para disfrutar de un vermut.
Tras la pausa, el grupo reemprendió la marcha; desde ahí se dirigió al conocido restaurante Siete de julio pasando por Santa Quiteria y Almazora, donde después de una comida copiosa con chuletón incluido, se hizo la entrega de premios a los asistentes.
Como cada año, el premio al socio más veterano veterano del club recayó en el Sr Palau, que cuenta ya con 87 años.
Se entregaron los diferentes premios, a la fémina asistente del club a bordo de una Lambretta, al participante más lejano (Antonio, del Lambretta Club Lleida) y al grupo más numeroso (Grupo de Valencia Formigues).
Un año más la salida fue un éxito de participación y de organización, con cerca de medio centenar de Lambrettas de todas las épocas, desde el año 1953 hasta las modernas de hoy en día, que se congregaron para disfrutar de una jornada de compañerismo y 100 km de recorrido.
