De vital importancia era el Test de Misano de MotoGP que tuvo lugar este martes y ayer miércoles. De vital importancia sobre todo para dos de los equipos que más están sufriendo esta temporada, Yamaha y Honda, en especial para este último. Ver al equipo más laureado de la historia de la categoría reina luchando por entrar en el ‘Top 10’ es algo que parecía impensable.
Para Honda era imprescindible el regreso de su estrella, Marc Márquez, ausente desde hacía 100 días, tras haberse operado por cuarta vez de su lesión de húmero. La operación fue bien, el hueso se ha soldado y se han cumplido los plazos previstos. Justo a tiempo: Marc pudo subirse a su CBR600RR en Motorland hace solo una semana y sus sensaciones fueron buenas.
Este martes salió a rodar ya a primera hora, en primer lugar sobre la RC213V de esta temporada. Tenía que recobrar sensaciones y probar su brazo. Dio 39 vueltas por la mañana, en varias salidas cortas, y por la tarde descansó:
«Realizamos tandas de cuatro vueltas cada una. Siempre calentaba dos vueltas y luego hacía dos vueltas más apretando. En el último intento hice siete vueltas seguidas para saber dónde estaba el límite. Inmediatamente noté que era demasiado», contó.
Con tres motos distintas por probar, a media mañana montó una con una aerodinámica que recordaba a la de la Aprilia. Acabó el día cansado, pero con una sonrisa: Marcó un 1:32.3, a un segundo del mejor tiempo del día.
Ayer, cansado aún, se pegó una paliza de 61 vueltas, repartidas en varias sesiones (34 vueltas por la mañana y 27 por la tarde, y acabó la jornada con un crono de 1.31.642, a 588 milésimas del mejor crono del día y nuevo récord de la pista, que logró Fabio Quartararo (1:31.054).
«Todo transcurre en el tiempo previsto. Ha sucedido exactamente como los médicos predijeron. Para mí ha sido un muy buen test. Para Honda, también, porque probé muchas cosas, especialmente el segundo día. Pero todavía queda mucho por hacer».
El tiempo de Marc le hubiese dado la pole el sábado… (Pole para Jack Miller, 1’31.899). Márquez fue la mejor de las cuatro Honda. Eso debería dar que pensar a sus otros tres compañeros de marca, que no se han pasado 100 días ausentes…
Todos sus rivales se alegraron de verle allí y vaticinaron que estará en Motorland la semana que viene. Él fue más prudente:
“Tenemos que ver las cosas día a día. El domingo o el lunes tendrá más sentido decidir si podemos probarnos en Aragón. De lo contrario, tenemos que mantener la calma y darle algo de tiempo a la recuperación”.
El martes manifestó que, a día de hoy, no estaba para aguantar todo un GP. Veremos, pues.
Por cierto, estuvo ausente de los circuitos 100 días y rodó en Misano 100 vueltas, una por cada día de ausencia.
El otro hombre feliz
El actual campeón, Fabio Quartararo, puso como condición para renovar con Yamaha tener un motor nuevo, que limase las diferencias de velocidad y aceleración con las otras motos, en especial de las Ducati.
En los test de Sepang y Mandalika ya vio que eso no era así. Eso motivo el lógico enfado del de Niza y alargó de manera ostensible las negociaciones. Fabio flirteó con otras marcas, hasta que obtuvo la firme promesa por parte de los ‘capos’ de Iwata que para 2023 sí tendría una moto rápida.
Todo eso debía corroborarse en este test de Misano, y el crono y las sensaciones dijeron que sí, que Yamaha ha hecho los deberes: la M1 de 2023 es mucho más veloz. Hay que pulir detalles, como una aceleración que aún es mejorable según Fabio, pero va por el buen camino. Quartararo marcó la segunda velocidad máxima en Misano, tras la Ducati de Martín.
El joven campeón francés pudo rodar con la M1 2023 tras Morbidelli, que en ese momento lo hacía sobre la de este año, y comprobó en vivo que la nueva moto era claramente más rápida.
Yamaha también ha trabajado en el chasis y la aerodinámica, y parece que todo funciona. Morbidelli afirmó que “el nuevo motor es un claro paso adelante. Es claramente mejor en velocidad y aceleración. Hay que felicitar a los chicos por el trabajo realizado: todo lo que podía desear ha llegado”.
Quartararo fue el más rápido los dos días, marcando ayer el nuevo récord de Misano, no oficial por tratarse de un test. El problema será volver a la realidad de 2022 la semana que viene.
Pero ojo, que nadie se ha dormido: las Ducati y las Aprilia siguen siendo rápidas. 2023 promete emociones.
Test de Misano de MotoGP. Tiempos combinados de martes y miércoles:
1º Quartararo, Yamaha, 1:31.054
2º Bagnaia, Ducati, + 0,118 seg
3º Viñales, Aprilia, + 0,135
4º Bastianini, Ducati, + 0,206
5º Aleix Espargaró, Aprilia, + 0,279
6º Martin, Ducati, + 0,385
7º Marini, Ducati, + 0,419
8º Oliveira, KTM, + 0,531
9º Bezzecchi, Ducati, + 0,537
10º Di Giannantonio, Ducati, + 0,551
11º Zarco, Ducati, + 0,552
12º Morbidelli, Yamaha, + 0,560
13. Marc Márquez, Honda, + 0.588
14. Pol Espargaró, Honda, + 0.653
15. Nakagami, Honda, + 0.732
16. Brad Binder, KTM, + 0.749
17. Alex Márquez, Honda, + 0.810
18. Miller, Ducati, + 0.873
19. Rins, Suzuki, + 0.882
20. Pirro, Ducati, + 1.016
21. Pedrosa, KTM, + 1.254
22. Fernández, KTM, + 1.292
23. Gardner, KTM, + 1.379
24. Bradl, Honda, + 1.580
25. Darryn Binder, Yamaha, + 1.766
26. Savadori, Aprilia, + 2.325
27. Aegerter, Suzuki, + 2.835
28. Dovizioso, Yamaha, + 3.843
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