La última subasta celebrada en el hotel Bally de Las Vegas, el pasado mes de enero, organizada por la famosa empresa de subastas Bonhams, fue de nuevo noticia. Con 221 motos puestas a la máxima puja, varias de ellas marcaron nuevos precios máximos alcanzados en una puja y lograron que la recaudación total se elevara hasta los casi cuatro millones y medio de dólares.
De entre las motos subastadas, desde los años treinta hasta la década de los 90, no faltó un ejemplar que perteneció al desaparecido y célebre actor y piloto Steve McQueen –parece que en toda subasta que se precie debe haber una moto de McQueen–, así como motos de marcas míticas y de culto como Vincent, Brough Superior, Matchless, Harley-Davidson o Ducati. De entre las motos récord, de nuevo, una Brough Superior SS100 de 1938 se vendió por 272.000 euros; para una Vincent White Shadow de la serie C, de 1950, de las que se fabricaron solamente 15 unidades, el mazo cayó en los 224.000 dólares –casi la misma cantidad de euros–, y otra Vincent, una Touring Rapide con sidecar, alcanzó los 126.500 dólares. Otra Brough Superior SS80 de 1936 con sidecar fue vendida por 115.000 dólares, la misma cifra que logró una Matchless G50, ex Dick Mann.
La Harley-Davidson X8E Big Twin de 1912 ex Steve McQueen se vendió por 117.300 dólares –100.000 euros– y por una bella y rara Ducati monocilíndrica de 1959, una 175 F3 de competición, se pagaron 89.700 dólares –77.000 euros.
De entre las motos más conocidas por nosotros, y seguramente con las que hemos soñado, cabe destacar los precios alcanzados por una Kawasaki Z900 de 1973 (14.600 e), una Kawasaki Z1R Turbo de 1978 (17.680 e), una Honda CBX de 1978 y una CB750 de 1970 (15.600 euros ambas). Una Ducati 450 Desmo monocilíndrica de 1973 logró la espectacular cifra de 19.600 euros… La curiosidad fue una Bultaco Pursang Mk10 ex Jim Pomeroy de 1977, que se vendió por solamente 2.500 euros…
Pero la moto moderna que logró el mayor precio jamás alcanzado para este modelo fue una Honda RC30 de 1990, con 1.000 kilómetros en el marcador, que se vendió por 44.800 euros…
También se subastaron otros objetos relacionados con el mundo de la moto, como recambios, libros, óleos, esculturas y pósters, que alcanzaron cifras como los 2.600 euros que se pagaron por un póster del GP de Barcelona de 1946, o los 10.600 euros de una escultura de Jeff Decker del famoso Flat Out del récord del lago Bonneville sobre una Indian.
El espectáculo de las subastas sigue adelante ya que durante este año habrá como mínimo un par más. ¿Caerán más récords?
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