Este año, la situación actual sanitaria ha obligado a cancelar casi todos los eventos moteros por las restricciones y demás precauciones médicas. Pero desde Mamuts, por no tener un año en blanco de eventos moteros, reinventaron la ruta Mamuts 2021 para que todos podamos disfrutar de la moto de la forma más segura posible.
Para ello crearon la Ruta Borderline, que bordeaba toda la Comunidad de Madrid por el interior de sus cuatro puntos cardinales, sin dejar de ser atractiva, y constaba de unos 630Km con trazados variados para diversión de todos.
La ruta era tan extensa como divertida para poder hacerla con tiempo y disfrutar de los paisajes y la carretera por lo que recomendaban realizarla como mínimo en dos días y daban todo un mes para hacerla.
Podías salir desde cualquiera de los puntos propuestos, en el orden que quisieras y realizarla al ritmo de días deseado. Te podías inscribir de forma online en la página web de Mamuts, en la que había varias opciones de inscripción que este año estaban a precio anticrisis.
La Inscripción full, por 15 euros, incluía la bolsa, camiseta, pegatinas, la ficha para recoger los sellos y el acceso a los roadbooks y ficheros para los GPS. También estaba la opción de adquirir solo los roadbooks y mapas por 5 euros.
Eso sí, para lograr el parche oficial de Mamuts, como todos los años, había que trabajárselo pues solo se entregaba a aquellos que completasen la Ruta, que obtuviesen los cinco sellos y demostrasen, con fotos, que habían recorrido toda la ruta.
Los puntos a recorrer eran por el norte de la Comunidad de Madrid: La Sierra de Guadarrama, parando en El Hotel FC Villalba de Collado Villalba, la Sierra Norte de Madrid con parada en el Bar El Rincón en Prádena del Rincón, población en la que respirabas el aire fresco de la montaña, paz y tranquilidad.
Siguiendo hacia el este, no podía faltar parada para hacer el aperitivo en Alcalá de Henares, Ciudad Patrimonio de la Humanidad, en la Taberna “La Dulce Harley” con una estupenda terraza al lado del monumento a La Mujer Motera.
Retomamos el camino hacia el sureste para empezar la Ruta de las Vegas de Madrid, en Villarejo de Salvanés, en la Cervecería La Latina. Y terminamos la ruta en el sur, con parada para comer en el Bar Daytona de Fuenlabrada, decorado con motivos custom americanos.
En definitiva, un buen evento motero para salir de la rutina de todo este tiempo de confinamiento, hacer turismo, trazar unas cuantas curvas y poder ver algunos amigos. Y, por supuesto, felicito a los Mamuts por el buen desarrollo de la Ruta Bordeline, esperando estar el año que viene, con las motos y todos juntos al calor de las hogueras.
Nos vemos en Mamuts, saludos y ráfagas.