Lo que se cuece en el garaje del Motorworks Brooklyn solamente lo sabe el americano Maxwell Hazan. Trabaja sólo, sin presión, y durante unos cuantos meses solo piensa en cómo recubrir un motor que le viene de fábrica, su punto de partida. Sus motocicletas son toda una novedad del mundo Custom gracias a unos diseños que no pasan desapercibidos por nadie, donde intervienen todo tipo de objetos no convencionales como faros de un tractor o herramientas de cocina. Y es en todo este cúmulo de elementos donde encontramos la marca personal del diseñador estadounidense. Sus últimas creaciones son la Royal Enfield y Harley Davidson Ironhead, ambas con un largo recorrido en el mundo Custom y que él no ha dudado en modificar.
La Royal Enfield, en este exclusivo diseño, centra su atención en el motor y el color plata generalizado y una cadena de bronce. Las grandes ruedas y el asiento minimalista en madera también destacan en el conjunto del diseño.
En cuanto a la Harley Davidson Ironhead, alberga como novedad principal un amortiguador delantero colocado en el eje central del manillar. Según el propio Hazan destaca: "En cada nueva moto intento instalar una suspensión que yo nunca he visto antes". En este caso, el motor de la Harley también adopta un cierto protagonismo a modo de homenaje y el asiento cumple una ligera función de guardabarros trasero.
Y mientras nosotros nos entretenemos observando estos prototipos, el diseñador, que en realidad es psicólogo, ya está pensando en la próxima creación. Seguro que nos volverá a sorprender.