El mercado y su oferta están cambiando, algo que te das cuenta con la prueba de la Voge 525 ACX, una moto que pinta muy bien y que tiene un precio realmente bueno.
Si queremos adquirir modelos de corte premium ya podemos ampliar el radio más allá de las habituales marcas japonesas, europeas o norteamericanas. Voge nos trae la 525 ACX, su nuevo modelo de aires scrambler para el A2, y si la pruebas con los logotipos tapados, sin saber de su origen, será fácil que asocies su tacto, acabados y comportamiento con cualquiera de las marcas que consideres como premium.
El motor se actualiza aumentando ligeramente de cilindrada
Quienes nos dedicamos a probar vehículos y opinar sobre ellos nos hemos encontrado cíclicamente con épocas en las que modelos de dudosa calidad llenaban las tiendas, procedentes en la inmensa mayoría de ocasiones de contenedores procedentes de China sin unos mínimos estándares de calidad, al menos al comparar con los cánones marcados por las marcas que podíamos denominar como serias. Y os podemos asegurar que no era divertido probarlos.
Pero en la actualidad suceden varias cosas, entre otras las normativas medioambientales o que rigen el trabajo de quienes importan, además de un notable cambio de filosofía de algunos de los grandes grupos empresariales chinos, que han hecho que la mayoría de los productos que llegan del gigante asiático vayan subiendo paulatinamente en cuanto a diseño, acabados, calidad de materiales y, afortunadamente, también en comportamiento y durabilidad.
En la prueba de la Voge 525 ACX se nota el nivel de autoexigencia de calidad que se han impuesto
Entre las marcas que han elevado -y mucho- el nivel de autoexigencia encontramos a Voge, la marca que Loncin -que fabrica tres millones de unidades al año- creó en 2018 para distribuir sus modelos de corte premium. ¿Resulta adecuado calificar así, como modelos premium, a vehículos que pasan, como es el caso de nuestra invitada de hoy, por poco de los 6.000 euros? La verdad es que nos ha convencido de ello del mismo modo que ha sucedido con los smartphone: nadie duda hoy en día de que marcas que nacieron solo para vender masivamente teléfonos baratos son las que ofrecen las tecnologías más punteras en sus modelos más avanzados de sus catálogos.
Tiene componentes de calidad como Bosch, KYB o Nissin, por ejemplo
Además de partir de un diseño que convenza de verdad a los gustos occidentales, los modelos que nos presenta Voge acuden a principales proveedores de componentes para dotar a sus modelos en materia de centralitas o cuerpos de inyección, moduladores de ABS, pinzas de freno, horquillas o amortiguadores, por ejemplo. Hay un cierto truco en ello: dichas primeras marcas (Bosch en el caso del ABS y de la alimentación de la moto, Nissin en cuanto a frenos o KYB en cuanto a suspensiones, si nos referimos a los componentes de la ACX 525) tienen grandes plantas de fabricación en China mismo, de modo que el coste y las legislaciones acaban creando la sinergia necesaria. Así que adiós a los elementos calificados como “sin firma” o “de producción propia” si, como es el caso, han de venir de verdaderos especialistas.
Más allá de los elementos que podríamos considerar como periféricos, el motor deriva de un esquema que ya funcionaba, pero aumentado sus cotas en busca de la mayor redondez posible. Pese a la denominación del modelo cubica 494 c.c., se gana no en cifras absolutas respecto del anterior 471 de la marca, sino en elasticidad. En la práctica contamos con un modelo igualmente ceñido a los 35 kW del A2, pero que requiere menos cambios de marcha y que acelera y recupera mejor al empujar con mayor consistencia desde unas 1.000 rpm más abajo.
Es una moto muy agradable y equilibrada, con muy buenos componentes y acabados
Es agradable en todo momento, desde la ciudad hasta las carreteras más retorcidas, incluso en alguna pista si te animas a aprovechar sus dimensiones de ruedas con llantas radiadas (por cierto, sin cámara, con Metzeler Tourance e incluso con sensores de presión). Su cambio es poco exigente (nuestra unidad iba aún un pelo duro, pero fruto de la falta de rodaje). El embrague antirrebote funciona de modo intachable, lo que pondrá las cosas fáciles a todos los usuarios, especialmente a los recién llegados. Y también lo hará que tanto su maneta como la de freno sean ajustables -un detalle olvidado por muchas marcas-.

El cambio parece bien escalonado, y el desarrollo final es adecuado para mantener los ritmos intermedios sin estrés, que es, junto al uso urbano, al que la mayoría de los usuarios destinarán esta bella ACX. El motor no emite el calor que solemos percibir de la mayoría de scramblers, modelos a menudo condicionados por el trazado de sus escapes. Hay que decir que los colectores y el silenciador de esta Voge no molestan, y los protectores térmicos que incluye son dignos de ese nombre.
El confort que el motor nos transmite se extiende a la ergonomía: el manillar es ancho, pero no exagerado, y siempre podremos girarlo mínimamente sobre sus torretas si queremos afinar con el ajuste. El triángulo que forma junto a manillar y asiento es muy relajado, pero los estribos están lo suficientemente elevados como para no arrastrarlos por el asfalto a las primeras de cambio. La verdad es que la moto permite inclinaciones importantes antes de rozar, se puede conducir más deportivamente de lo que su amable aspecto pueda sugerir. El peso está bien repartido y ni cabecea en exceso al frenar, ni falta aplomo en curva.
El motor bicilíndrico twin funciona bien en todos los escenarios
De hecho, es tan aplomada que vimos al concesionario jugar con las alturas de la horquilla para acabar de adaptarla a preferencias, pero vamos, innecesario para la inmensa mayoría de usuarios. Hablando de reglajes, la precarga del amortiguador trasero tiene capacidad para ello, pero resulta muy poco accesible y requiere desmontar las tapas laterales para acceder a su mecanismo de ajuste. Tampoco hará falta jugar con eso porque el muelle no es demasiado blando, se percibe algo más absorbente la horquilla que el amortiguador. Pero practicando una conducción poco estresada, la verdad es que funciona muy bien tal y como viene.

En materia de frenos nos convenció mucho por potencia y tacto el trasero, nos hubiese gustado algo más de mordiente en el delantero a baja velocidad, pero lo cierto es que como conjunto trabajan muy bien, y el ABS tarda en entrar en acción. Notable para toda la parte ciclo.
Dinámicamente funciona bien en curvas o autopista, algo que queda patente en la prueba de la Voge 525 ACX
Mención aparte merece la electrónica ligada a la pantalla TFT de 7”: no solo cuenta con dos patrones de diseño y es capaz de mostrar mucho más de lo que podríamos considerar como necesario, sino que está bien pensada: la mayoría de los datos que no son imprescindibles durante la marcha se leen solo accediendo al menú correspondiente, en parado. En marcha no se puede manipular para no perder la atención, y nos ofrece la información más relevante. Dispone de la posibilidad de conectarse al teléfono (que puede cargarse en la toma USB del costado izquierdo) y crear incluso una red Wi-Fi a su alrededor para vincularla a más dispositivos. Legible y clara en marcha, compleja y completa en parado.
El caso es que nos encontramos con un modelo con buen comportamiento, con un motor muy elástico y fino, con detalles como unos intermitentes que parecen ser aftermarket del caro, no del de Aliexpress, y con una línea simpática y elegante. Su importador nos la ofrece a un excelente precio y con 5 años de garantía y el seguro gratis durante el primer año. Con modelos así tenemos claro que el origen del modelo ha dejado de ser un problema, y que algunos productos que vienen de China se han ganado por méritos propios que los consideremos como de primera calidad. Está a la venta a un precio de 6.287 euros con 5 años de garantía.

Solo+ Solo-
Solo+
En la prueba de la Voge 525 ACX destacamos un motor completo, de lo mejor del A2: buen tacto de gas y muy lleno. Suspensiones y frenos en un chasis muy noble. Equipamiento y acabados de primera.
Solo-
Asiento un poco alto y más bien ancho, lo que echará para atrás a las tallas más pequeñas. Acceso a la precarga del amortiguador complicado.

Cómo va en…
Ciudad
Gira bien, es muy manejable y la rueda delantera no se inmuta frente a obstáculos. Buen reparto de pesos que ayuda a moverla fácilmente, y el motor es suave a bajo régimen.
Carretera
Por geometrías es más estable que ágil, lo que da confianza desde los primeros tramos virados. No requiere esfuerzo moverla de un lado a otro y las suspensiones y los frenos cumplen con solvencia.
Autopista
Mejor dejar las vías más rápidas para lo imprescindible, lógico. Pero hay que decir que en la prueba de la Voge 525 ACX notamos que no es incómoda a ritmos legales, ya que no vibra salvo a altas rpm, y su ergonomía es muy buena.

Ficha Técnica
Motor tipo: | 2 cil. línea 4T LC DOHC 8V |
Diámetro x carrera: | 68,0 x 68,0 mm x2 |
Cilindrada: | 494 c.c. |
Potencia máxima: | 47,6 CV (35 kW) a 8.500 rpm |
Par motor máximo: | 4,5 kgm (44,5 Nm) a 7.000 rpm |
Compresión: | 11,5:1 |
Alimentación: | Inyección electrónica Bosch |
Emisiones de CO2: | 88 g/km |
Cambio: | De seis relaciones |
Embrague: | Multidisco en baño de aceite, por cable, sistema antirrebote |
Transmisión secundaria: | Por cadena de retenes |
Tipo chasis: | Tubular en acero al CrMo |
Geometría de dirección: | N.d. |
Basculante: | Doble brazo en aluminio |
Suspensión delantera: | Horquilla invertida KYB 41/151 mm, sin reglajes |
Suspensión posterior: | Amortiguador KYB con bieletas, 64,5 mm de recorrido en vástago, precarga ajustable |
Freno delantero: | 2 discos lobulados de 298 mm, pinzas Nissin de 2 pistones, ABS Bosch |
Freno trasero: | Disco lobulado de 240 mm, pinza Nissin de 1 pistón, ABS Bosch |
Neumáticos: | 110/80×19” y 150/70×17” |
Largo total: | 2.150 mm |
Altura máxima: | 1.230 mm |
Anchura máxima: | 820 mm |
Distancia entre ejes: | 1.450 mm |
Altura asiento: | 840 mm |
Depósito: | 19 l |
Consumo medio: | 4,8 l/100 km |
Autonomía teórica: | 396 km |
Garantía oficial: | 5 años |
Peso: | 198 kg |
Precio: | 6.287 € |
Importador: | Voge Spain / Onetrón Motos SLU |
Contacto: | 961 539 330 |
Web: | Voge Spain |
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