Como la recientemente publicada prueba de la Husqvarna Vitpilen 401 aquí tenéis otro de los miembros de la saga de carretera. La Husqvarna Svartpilen 401 parte de la misma base e incorpora una serie de cambios, sobre todo estéticos, que la hacen mucho más transgresora y rebelde.
Husqvarna sigue reforzando, así, el nuevo camino que ha emprendido, que se suma a la potente y más conocida línea offroad y supermotard. Esta naked es, por tanto, una novedad en muchos sentidos.
El motor es un monocilíndrico de 373 c.c. y 44 CV de potencia, con puño de gas electrónico (ride by wire), que gestiona y entrega todo su potencial con precisión y con un tacto agradable. Es un modelo ideal para el A2, un segmento que sigue ganando importancia, tanto a nivel de mercado como por la creciente apuesta que hacen las marcas.
La Svartpilen 401 ofrece un gran rendimiento y unas prestaciones que poco tienen que envidiar a algunos modelos de mayor cilindrada.
Ambigüedad
Estamos ante un modelo de lo más ambiguo en lo referente a utilidad y facilidad a la hora de cambiar de registro. Tanto puede ser un modelo 100 % urbano como un buen compañero en tus salidas por tramos de curvas.
Por tamaño, dinamismo y dulzura en marcha es perfecta para la ciudad, pero tengo que reconocer que donde más me divertí fue en las carreteras más reviradas. Te lo pasas como un auténtico niño. Es compacta –en medidas generales, no en altura de asiento–, manejable, ágil y con un paquete ciclo que despierta la faceta canalla que llevas dentro.
La suspensión se lo come todo y se mantiene firme y con aplomo incluso cuando apuras hasta el vértice. Te recoge en la entrada de la curva, te da confianza en el momento de máxima inclinación y responde perfectamente al abrir gas.
Lo único que te puede hacer dudar –más psicológicamente que otra cosa– son los neumáticos mixtos. Puedes tener algún susto si te animas más de la cuenta, pero, insisto, esto es solo si se te va la pinza, porque, en condiciones normales, va perfecta. Esto únicamente pasará rodando en solitario, claro, porque con dos a bordo la cosa cambia. Sí, porque la Svartpilen es biplaza.
Para dos, aunque no lo parezca
A simple vista parece que la Svartpilen 401 sea solo para uso y disfrute individual, pero lo cierto es que estamos ante un modelo biplaza.
Si buscáis las asas para el pasajero en esta unidad de pruebas, ya os digo que no las vais a encontrar. Pero sí que las tiene. Puedes pedir que te las instalen cuando la compras, así que montarlas o no está en tus manos, en función del uso que le vayas a dar.
Eso sí, cuando vayas a la ITV, de aquí a cuatro años, deberás llevarlas montadas... Algo que también ocurre con la Vitpilen 401...
Svartpilen y Vitpilen 401: Mellizas, no gemelas
Mellizas, que no gemelas. Las Husqvarna Svartpilen y Vitpilen 401 comparten prácticamente todo. Salen de la misma madre, comparten estética despampanante y atractiva y disponen de una parte ciclo brutal. Pero, como veis, por fuera son totalmente distintas y se parecen como un huevo a una castaña.
Para empezar, por un tema de colores. Del blanco perla digno de un anuncio de Neutrex de la Vitpilen al negro rebelde de la Svartpilen, como bien indica su nombre, que en sueco se traduce literalmente como ‘flecha negra’.
Los neumáticos también cambian, no así las llantas. La Svartpilen monta unos mixtos que estéticamente son un puntazo, aunque en marcha pierdas algo de confianza. Y uno de los aspectos más llamativos es el manillar, del que cambia la forma, la anchura y la posición.
Para la Svartpilen está más elevado y posiciona el cuerpo en una postura más incorporada, recta y cómoda. Vamos, la típica de las naked. Ganas en relax pero pierdes algo de aerodinámica. Tampoco pienses que vas a quedar más tieso que la nevera de tu casa porque, si te fijas bien, las estriberas – elevadas y atrasadas– inclinan el cuerpo un poco hacia delante.
El resto son detalles algo más sutiles que las diferencian, como el caso de la parrilla portabultos que monta sobre el depósito.
Accesorios pata negra
La lista de accesorios que puedes añadir es considerable. Algunos son más funcionales, como la toma USB, las bolsas portabultos o una pequeña cúpula, y otros más estéticos, como es el caso del protector del faro.
Pero, sin duda, uno de los que más destaca es el embrague Rekluse, una novedad que actualmente montan muy pocas motos y que va ganando fans a medida que pasa el tiempo. Se trata de un extra que puedes añadir a modo de kit por 595 euros. Ganarás en comodidad a la hora de circular y te facilitará la vida en la ciudad.
Al principio te puede parecer raro, pero te acostumbras rápidamente y después no puedes vivir sin él. Tiene su rollo eso de estar parado en el semáforo con la primera engranada, sin apretar el embrague, arrancar como si de un scooter se tratara y sin que se te cale por muy baja de vueltas que la tengas.
Te permite ir más relajado y centrado en la conducción, te ahorra problemas y situaciones estresantes en marcha y te hace disfrutar al 100% de tus trayectos. Todo son ventajas. Ya que, de entre sus rivales, ninguna goza de este accesorio extra, verdaderamente exclusivo.
Duras rivales
Las contrincantes más directas de la Svartpilen 401 son su hermana Vitpilen 401, la KTM 390 Duke, la Honda Neo Sports Café CB300R, la BMW G 310 R, la Yamaha MT-03 y la Benelli BN 302 ABS.
Las diferencias son evidentes. Si por algún rasgo destaca, es por el estético, con una mezcla de estilos que puede ser un motivo de peso para los posibles compradores. La imagen ya no solo se tiene en cuenta a la hora de vestir, sino que está llegando a muchos otros ámbitos de nuestro día a día. Y eso implica, también, el medio de transporte.
Así que esta novedad de Husqvarna tiene muchas papeletas de enganchar al público por la personalidad que desprende, por el carácter único y por una imagen que se desmarca con creces del resto. Si te apetece, puedes solicitar aquí una prueba de la Svartpilen y aprovechar la oferta de financiación al 0% que tienen ahora mismo disponible.
Ficha técnica Husqvarna Svartpilen 401
Motor tipo | Monocilíndrico 4T LC DOHC 4V IE |
Diámetro x carrera | 89,0 x 60,0 mm |
Potencia máxima | 44 CV (32 kW) a n.d. rpm |
Par máximo | 37 Nm (3,8 kgm) a n.d. rpm |
Compresión | N.d. |
Alimentación | Inyección electrónica |
Arranque | Motor eléctrico |
Embrague | Multidisco en aceite y antirrebote, por cable |
Caja de cambios | De 6 relaciones |
Transmisión secundaria | 15:45 |
Geometría dirección | 25° y n.d. mm de avance |
Tipo chasis | Multitubular en acero al CrMo |
Basculante | Doble brazo en fundición de aluminio |
Suspensión delantera | Horquilla invertida WP con barras de 43/142 mm, sin ajustes |
Suspensión posterior | Monoamortiguador WP anclado directamente al basculante, precarga ajustable, 150 mm |
Freno delantero | Disco de 320 mm, pinza radial ByBre de 4 pistones, ABS Bosch 9M+, desconectable |
Freno trasero | Disco 230 mm, pinza ByBre flotante de 1 pistón |
Largo total | N.d. |
Altura máxima | N.d. |
Distancia entre ejes | 1.357 |
Altura asiento | 835 mm |
Anchura máxima | N.d. |
Peso en orden de marcha | 150 kg |
Depósito gasolina | 9.5 l litros |
Precio matriculada | 6.545 euros |
Garantía oficial | 2 años |
Importador | Husqvarna Motorcycles |