Normalmente no probamos de manera tan exhaustiva el equipamiento pero esta vez rematamos de cabeza (de forma totalmente involuntaria) una furgoneta que frenó bruscamente delante nuestro. Hemos de decir que la peor parte se la llevó la furgoneta (si exceptuamos un par de fracturas nuestras) y que al Scorpion tan sólo se le rompió la deriva superior, como se ve en la foto. Ningún daño en nuestra cabeza…
Por lo demás, el Scorpion Exo soporta muy bien el paso del tiempo, ya que éste en concreto tiene más de tres años de uso diario. Es confortable, y dispone de visera interior retráctil ahumada, además de la exterior, y de una práctica bomba de aire con la que podremos ajustarlo a nuestra cara perfectamente. El interior es totalmente desmontable y lavable, cosa que se ha hecho ya un par de veces.
Tan sólo muestra un ligero desgaste en la parte inferior del forro que roza con el cuello la chaqueta y, como todos los cascos de doble visera, es algo pesado.
Un casco con una buena relación calidad-precio.