Prueba del Bell ProTint, la visera de casco que se oscurece automáticamente

Prueba del Bell ProTint, la visera de casco que se oscurece automáticamente

Os ofrecemos la prueba del Bell ProTint, la visera de casco que se oscurece y se aclara automáticamente según las condiciones de la luz ambiente.

La marca americana de cascos Bell equipa en sus cascos de gama alta una visera de casco que se oscurece automáticamente, como las gafas de sol de antaño, la visera Bell Protint.

Lo ofrece de serie en su gama de cascos de asfalto Qualifier DLX, aunque también la ofrece como equipamiento opcional que se puede comprar separadamente para montarla en un RS-2 o un Star DLX.

Se trata de una visera transparente y clara que se oscurece automática y gradualmente en cuanto comienza a recibir la luz del sol.

Del mismo modo, en cuanto desaparece la luz, la visera vuelve a su estado original transparente e incoloro. Es la visera con tecnología ProTint patentada por Bell, y que no utiliza ninguna clase de batería o pila para su funcionamiento.

undefined

Es el mismo sistema usado hace décadas en los cristales de gafas, que se oscurecen por la radiación ultravioleta, pero en este caso el componente fotocrómico se ha aplicado a un material plástico no en cristal, lo que es todo un logro.

O sea, que la visera reacciona ante la luz ultravioleta, oscureciéndose automáticamente, lo cual te permite disponer de una visera clara y otra oscura, dos en uno, sin necesidad de disponer de las típicas "gafas de sol" tan de moda en los cascos integrales.

La visera Bell ProTint se oscurece y se aclara automáticamente, pero su tiempo de reacción es lento

Una de las ventajas es que esta visera no disminuye la resistencia a los impactos de la calota del casco, caso que sí ocurre en aquellos que equipan las "gafas de sol" escamoteables que se ocultan bajo la calota con una leva que acciona el piloto.

Para comprobar las bondades y defectos de la visera Bell ProTint, la sometimos a una prueba de uso. Nos sacrificamos y salimos a dar una vuelta en moto un sábado, para ver su efectividad en todo tipo de condiciones. Todo sea por Solo Moto...

undefined

La visera Bell ProTint montada en nuestro casco Bell Qualifier DLX es gruesa, sólida y se nota resistente a nuestra manipulación, con un cierre hermético y fácil. En la oscuridad del garaje la visera es incolora y transparente.

Salimos a la calle en un día soleado y despejado, sin nubes. Intenté fijarme para ver si sería capaz de percibir el oscurecimiento de la visera, pero no fue así.

La visera se oscureció gradualmente y no pude apreciar el cambio. Quizás tardó un par de minutos, no es instantáneo, y solo me di cuenta al mirarme en el retrovisor.

El cambio entre visera clara y visera oscura es muy gradual y no se percibe

El ahumado no es intenso, al menos desde dentro no se aprecia como tal, pero externamente la visera está muy oscura y casi no percibes tu cara reflejada en el retrovisor.

Y funciona porque a mí, personalmente, me molesta mucho la luz del sol yendo en moto, y conduje perfectamente. Pero ahora vendría la prueba de fuego y una de sus razones de ser...

Con la visera totalmente oscurecida tras media hora de conducción a pleno sol, había que probar si al entrar en un túnel era efectiva...

Y allí estaba el primer túnel de la carretera, de unos 5o metros. En esta ocasión sí que estuve atento a mi imagen reflejada en el retrovisor para ver si la visera se aclaraba.

rápidamente...

undefined

La verdad es que en los escasos 20 segundos que tardé en atravesar el túnel la visera no se aclaró. Siguió oscura, por lo que su tiempo de reacción no es tan rápido como pensaba.

Probé en un segundo túnel de mayor longitud, de unos dos kilómetros. Aquí la visera comenzó a aclararse a medio túnel, por lo que podemos testificar que su tiempo de reacción es lento, así que en los túneles cortos y poco iluminados, y al principio de los túneles largos aconsejaríamos levantar la visera.

En cambio donde sí se mostró perfecta fue en la transición, tarde-noche, ya que la visera tiene tiempo de sobras para acomodarse al cambio de luminosidad ambiente. Se acomoda a la luminosidad ambiente por lo que es una visera, además, gradual, que te ofrece diferentes grados de ahumado según la luz recibida.

Aquí sí que se mostró 100% efectiva, por lo que tras rodar todo el día al sol con tu visera oscura, podrás volver a casa de noche sin problemas ya que la visera estará totalmente aclarada.

Aquí reside la gran ventaja de esta verdadera visera dos en uno, en los cambios graduales de luminosidad, no en los inmediatos.

Y un dato negativo es que es una pena que esta visera no esté disponible para otros modelos de cascos. Son solo para cascos Bell y determinados modelos de carretera. Su precio es de 80 euros.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...