Hace un par de años tuve la suerte de descubrir la primera versión de la Indian Scout en Sturgis, EEUU. En aquella ocasión pude apreciar que el trabajo de Indian iba muy en serio y que con su brillante motor en V de 1.333 c.c. se abría un amplio abanico de posibilidades que con la misma base, alcanzaría a otros modelos y cilindradas. De momento no han llegado nuevos modelos y personalmente espero con impaciencia una naked revolucionaria que se presentará en marzo en EEUU.
De momento en Polaris y con buen criterio, han decidido producir la nueva Scout Sixty que es prácticamente igual a su hermana mayor, pero con un propulsor de 999 c.c. que rinde 22 CV menos y que se puede limitar a 48 cv con lo que puede ser una buena alternativa para los noveles del A2.
Exteriormente esta Scout Sixty se diferencia de la grande en pequeños detalles. El más evidente es que en el logo del depósito de combustible aparece el nombre de la marca, pero no el de Scout. Si nos fijamos con más detenimientos observaremos que el asiento no es de piel como en el modelo de 1.333 c.c., sino de piel sintética, aunque conserva el mismo diseño. En el frontal del faro se echa en falta una tapa que cubra el cableado y el color negro sustituye a algunos cromados de las tapas y el faro. Poco más.
Los cambios más profundos llegan a nivel de propulsor, puesto que tiene cinco velocidades en lugar de seis, y cuenta, como decíamos, con menos potencia. Su cilindrada de 999 c.c. se ha conseguido reduciendo el diámetro de los pistones en 6 mm. y conservando la misma carrera (73’6 mm.), de la versión de 1.133. Una moto que, por cierto, ha tenido una buena acogida a pesar de cierto retraso a nivel de entregas por algunos problemas menores que afectaron a la producción de los nuevos modelos. Una vez solucionados (dicen que el problema vino proveedor de las llantas), la nueva Sixty me parece un soplo de aire fresco entre las “Cruiser Midsize”.
La moto conserva las buenas maneras de su hermana mayor en cuanto a su parte ciclo y puedo asegurar que esta a un nivel superior al de motos de su competencia. Lo mismo sucede con el propulsor que tiene muy buen tacto, es suave y progresivo, con “ride by wire” y con la cola de los escapes Vectrum (accesorio), emite un sonido muy emocionante.
Tuvimos oportunidad de probarla en una ruta con salida desde Marbella, Málaga, por la Serranía de Ronda. Y os puedo asegurar que me volví a llevar la sensación que más que una cruiser, se comporta como una roadster que se conduce con los pies adelantados y las manos arriba.Las prestaciones del bicilíndrico creo que son más que suficientes para una moto de este estilo y mi sensación es que teniendo en cuenta que cuesta dos mil euros menos que la versión “grande”, la Sixty le puede quitar ventas y protagonismo a la denominada simplemente Scout.
Su comercialización ya se ha puesto en marcha y el precio final es de 11.600 €.