¡Nos gusta Jack Miller!... espíritu "aussie" 100%

No le gustan las comparaciones con Casey Stoner porque el quiere ser él mismo, y aquí surge la personalidad de Jack Miller. El chico de diecinueve años y de Queensland (la tierra de Stoner) es la nueva esperanza del motociclismo australiano y su historia atrae porque tiene distintos puntos en común con la de Casey: Jack también ama la naturaleza, la pesca, los espacios grandes -uno de sus hobbies es el movimiento del ganado- y ha crecido en una granja; también él empezó a correr en moto con cinco años, primero haciendo MX y después dirt track, y dejó Australia ente los 14 y los 15 años para seguir el sueño en los GGPP de velocidad.

Hay similitudes incluso en el aspecto familiar: también los Miller, como los Stoner, invirtieron su patrimonio para permitir a uno de sus hijos ir a Europa para seguir su sueño. Incluso Jack Miller, como Casey Stoner, obtuvo su primera victoria en los GGPP encima de una KTM en la categoría pequeña: Casey en 125cc, Jack en Moto3. “Pero yo soy muy distinto de Stoner”, dice un Miller que al contrario de su compatriota es un tipo sociable, que se divierte en el paddock y que aprecia Europa.

De él sorprende lo rápido que ha quemado etapas para convertirse en el piloto de referencia. En primavera, en Qatar, cuando ganó la carrera que abrió el campeonato 2014, no sólo conquistó su primera victoria en el Mundial, sino también su primer podio… Después repitió en Texas. En sólo siete meses ha pasado “de una situación en la que no me consideraba nadie a la que todos los mánager se han dado cuenta de que existo”, como dice él.

Pero en realidad Miller ya se hizo notar en 2013, por ser era el único piloto Honda capaz de acercarse a los españoles que dominaban con las KTM. Hoy, ahora pilotando él una moto de la marca austriaca, es el líder de la Moto3 y HRC le ha elegido como el piloto con el que Honda tiene la intención de hacer un experimento: llevar a un piloto de la menor de las categorías de los GGPP directamente a MotoGP sin pasar por la clase intermedia. Una idea que llama la atención incluso a Marc Márquez. Una señal de que este simpático australiano, extrovertido, inteligente y rápido posee algo que no deja indiferente.

“Soy un chico normal, no tengo un don divino. Me comporto de una manera normal: me comprometo con lo que hago y espero dejar un buen recuerdo entre la gente”. Puede que sea así, pero hace volver a los tiempos de la llegada de Valentino Rossi al Campeonato del Mundo para encontrar un piloto de la menor de las categorías tan seguido mediáticamente. Y por cierto, ¿sabéis en qué modelo se inspira o inspira a Jack?  “¡Valentino!”, afirma sin dudarlo. Valentino Rossi es mi modelo por lo que ha ganado, pero también por lo que ha hecho para aumentar la popularidad de su deporte. Su secreto no está sólo en su muñeca derecha sino en su cerebro. El siempre ha sido el más grande, siempre ha sido capaz de mirar un poco más hacia delante. Lo estudio desde hace años y me gustaría llegar a ser así, como él”.

Después de vagar de un lado a otro por Europa siguiendo las carreras que se celebraban los fines de semana, ahora Miller vive en Tarragona. “Así es, vivo a 15.000 kilómetros de casa. España es perfecta para mí: tiene el clima, los circuitos, los sitios para entrenar; y también la playa y la diversión”.

Pregunta: ¿En Australia tienes casa?

Respuesta: Vivo en una granja de familia, es muy grande y puedo hacer lo que quiera. Amo la vida al aire libre, me gusta mucho criar las vacas y caballos.

MS: Es la imagen que tenemos por aquí de vosotros los australianos…

JM: Lo digo en serio: la propiedad es tan grande que puedo entrenar también para mi deporte. Construí una pista de motocross, así cuando estoy en casa puedo ir en moto todos los días.

P: ¿Vives en la misma zona de algunos grandes “ex”, como Stoner y Bayliss?

R: Digamos que somos todos de Queensland pero yo vivo al norte, es decir a 1600 km de donde están ellos. Pero es verdad que tenemos la misma cultura de la moto.

MS: ¿En qué sentido?

JM: En general, venimos de la tierra, del dirt track. En Australia este es un camino  a seguir obligatorio, porque no hay un verdadero “movimiento” de pilotos de velocidad. De pequeño pensaba que sería piloto de MX, y practicaba también dirt track. Iba rápido, gané carreras y campeonatos, pero después hubo un problema.

P: ¿Cual?

R: Me hacía demasiado daño. Iba rápido y me caí; me recuperaba y cuando volvía a coger la moto e iba más rápido aún… y volvía a caer. Y tenía que empezar de nuevo. ¡A los 14 años tenía ya 23 fracturas! Me di cuenta que estaba destruyendo mi cuerpo y entendí que tenía que probar con algo distinto. Me pasé a la velocidad. Y fue la decisión acertada.

P: Pero eso te llevó a tener que dejar tu país.

R: En Europa, en particular en España e Italia, los niños y adolescentes tienen los pilotos de velocidad como ídolos; empiezan con las minimotos y después siguen un camino “in crescendo”. En Australia esto es imposible: no existen las minimotos, no hay esta cultura. Este es el motivo por el cuál me acerqué a la velocidad a los 14 años.

P: ¿Cómo empezaste?

R: Me invitaron a Tasmania para una carrera del campeonato australiano de Superbikes y terminé séptimo. Me divertí y decidí continuar. Terminé la temporada en cuarta posición aunque tuve que renunciar a cuatro carreras porque en ciertos estados no se puede pilotar con 14 años. Y gané el campeonato junior 125. Entendí enseguida que si me quedaba en Australia no había futuro, así que aproveché un contacto de un mecánico para organizar un viaje a Europa.

MS: Como australiano, eres representante de una “raza” de pilotos que han hecho cosas importantes para este deporte. ¿Alguno de ellos te ha inspirado especialmente?

JM: Al inicio mis referencias eran muy distintas: empecé con el MX, así que de pequeño me inspiraba con McGrath y Carmichael. Respecto a los pilotos australianos de velocidad, los respeto a todos: por ejemplo Doohan, Beattie, Corser; … y Bayliss, al que aprecio mucho por su enfoque de las carreras y la vida. Pero si tengo que decir un nombre, digo Wayne Gardner.

P: ¿Por qué él?

R: Fue a Europa cuando para un chico australiano no era fácil tomar esa decisión. No existían grandes relaciones con el paddock, no habían las posibilidades de hoy. Él se fue solo con una maleta y nos abrió el paso a todos nosotros.  Si hoy un australiano llega a los GP fácilmente es también gracias a él.

P: ¿Alguna de estas estrellas te ha ayudado, te ha echado una mano?

R: ¡Nadie! Lo hemos hecho todo solos, en familia. A veces equivocándonos pero siempre aprendiendo algo. Debo todo a mis padres: ellos arriesgaron, también económicamente.

P: ¿Viven contigo en Europa?

R: Mi madre desde el 2010 ha estado siempre conmigo; mi padre se quedaba solo la mitad de la temporada porque tenia que estar en Australia para continuar con su trabajo. Mi madre estuvo conmigo hasta mitad del 2013, ahora estoy solo.

P: Los australianos normalmente sienten nostalgia de casa. ¿Tu la sientes?

R: Sí, pero se me pasa porque tengo objetivos por cumplir: quiero ganar todo lo posible.

P: Eres joven, pero parece que tienes todo claro en la cabeza.

R: Siento nostalgia de mi tierra y de mi vida allí pero la vida está hecha de compromisos y yo he aceptado el compromiso de vivir a 15.000 km de casa para hacer lo que más amo en el mundo: correr en moto. Hay gente que se levanta al alba para ir a trabajar, otros pasan todo el día en una oficina. Seamos honestos, uno como yo es un privilegiado.

P: ¡Es verdad!

R: En cuanto a la nostalgia, no quiero hacer como esos que se cierran en si mismos y no disfrutan de lo bonito que nos ofrece la vida. Yo disfruto de la liberad, quiero ver y entender el mundo: quiero ampliar mis horizontes, abrir mi mente. Es importante para un joven. Así que estoy realizando amistades en España y Europa e intento divertirme todo lo que puedo.

P: Tienes razón cuando dices que no eres uno como Stoner.

R: Lo digo no porque no aprecie a Stoner –creo que es un piloto excepcional– pero porque yo soy distinto. Casey es una persona particular… Es un tipo un poco especial.

P: El no vivía tan a gusto en Europa como tú.

R: Casey no la apreció porque no quiso nunca alejarse realmente de Australia. En cambio yo me digo a mí mismo que esta es mi segunda vida, que Europa es mi segunda casa, y que cuando termine mi carrera seré todavía un hombre joven que disfrutará de la vida en Australia. Es inútil mirar solo los aspectos negativos: para mí correr en moto es el sueño de mi vida, es el trabajo que quería hacer así que viajar tanto y estar poco en Australia forma parte del juego. Además yo considero esta fase de mi vida muy excitante: acabo de alcanzar la edad para conducir en todos los países así que soy libre de ir donde quiera.  Intento aprender a arreglármelas solo. Cometo errores pero la vida esta hecha de experiencias y todas sirven.

P: Además, puedes volver a casa cuando quieras…

R: Pero  es que yo no quiero vivir en un avión. No quiero estar sentado 28 horas sin saber que hacer solo para estar en cada unos días. No tiene sentido. Hay quién lo hace pero yo no quiero hacerlo. Por eso me estoy organizando la vida en Europa: quiero estar bien aquí.

P: ¿Tu cultura de la moto ha influenciado tu pilotaje?

R: Totalmente. Nosotros, como los americanos, tendemos a acercarnos enseguida a las motos potentes porque allí no existen las motos pequeñas. Mi estilo de pilotaje es muy físico, porque deriva de mis inicios en el motocross y el dirt track: utilizo el freno posterior para enderezar la moto. En ese sentido la KTM es perfecta para mi estilo: durante el invierno hemos hecho tantos test y hemos encontrado la configuración perfecta.

MS: ¿En moto eres instintivo o reflexivo?

JM: Por ahora tiendo a fiarme más de mi feeling pero quizá porque en estos momentos pilotos motos pequeñas y estoy en mis inicios. Digamos que hago lo que siento aunque esta mentalidad me haya hecho cometer errores también este año.

P: Tendrás que tenerlo en mente en lo que queda de campeonato.

R: Es verdad, especialmente si quiero ganar el título. Tengo que esforzarme a pensar que en ciertos momentos va bien gestionar la situación o la ventaja.

P: en alguna carrera has sabido reservarte para el final.

R: Esto es consecuencia de las experiencias del año pasado cuando tenía una moto que no era muy potente y tenía que usar la estrategia.

P: En el 2013 te hiciste notar porque eras el único que era fuerte con la Honda.

R: La moto no era el desastre que todos decían. Es decir, no era la mejor, pero tenía algunos puntos buenos e intenté aprovecharlos. No tenía motor pero tenía un buen chasis que permitía ser rápido en los cambios de dirección o en curva: me concentré en esa técnica de pilotaje para compensar la potencia del motor.

P:…listo además de talentoso.

R: Un buen chasis te permite consumir menos los neumáticos y así ser eficaz al final. Si no destruyes los neumáticos te la puedes jugar al final. De hecho el año pasado a final de temporada, en Malasia e Australia, me acerqué al podio y vi que la victoria no estaba tan lejos porque cambié mi pilotaje en base a las exigencias para gastar menos el neumático. De hecho empecé un trabajo que me servirá porque con cualquier moto que tengas es fundamental saber gestionar las gomas.

P: Este año has subido a la KTM y has empezado a ganar. ¿Te lo esperabas?

R: Esperármelo no, pero era mi objetivo. Pensaba que podía ganar alguna carrera pero no que ganaría la primera carrera y la segunda…

P: No sólo eso, ahora eres el líder del Mundial.

R: Pero yo tengo los pies en el suelo, es fundamental. Cuando oigo las cosas buenas que dicen de mi evidentemente me gusta pero no me exalto. Quiero ganar en todas las categorías en las que corra, pero estoy en la fase de construir mi carrera y tengo que estar calmado. Para tomar las decisiones adecuadas tengo que tener humildad y ser razonable.

P: A propósito, ¿te atreverías a pilotar una MotoGP el año que viene?

R: Se habla mucho pero hay que reflexionar bien. Se está diciendo de todo y se que un compatriota mío ya lo ha hecho: Garry McCoy pasó de 125cc a 500cc. Pero antes de hablar es necesario que llegue un acuerdo y un proyecto real.

P: ¿Qué tienes en mente?

R: El objetivo final ciertamente es MotoGP. Lo es por mis aspiraciones, por mi cultura, porque Australia necesita un protagonista de MotoGP y creo que podría ser ese piloto. Pero veremos cuando se materializará.

P: El mánager del Team MarcVDS emitió hace unas semanas asegurando  que tienes un contrato de dos años con ellos para correr en Moto2.

R: Yo me siento libre de hacer lo que quiere en la vida. No serán ellos a decidir que tengo que hacer con mi carrera. Tengo distintas posibilidades y las decisiones las tomo yo.

P: Entonces… ¿tienes un plan?

R: Tengo claro que no quiero quedarme en Moto3. Primero porque quiero dar un paso adelante pilotando motos más grandes. Y en segundo lugar porque peso 63 kg y es demasiado para la Moto3: ¡me toca pasar hambre para conducir esta moto!

P: Tendrás que evolucionar rápidamente tu estilo de pilotaje.

R: Estudio continuamente para aprender, es un placer y un deber.

P: ¿Cuál es tu característica técnica principal?

R: La frenada. Me veo bien también en el paso por curva, que es muy importante, pero estoy trabajando mucho en la técnica de la salida de la curva ya que puede resolver el duelo en la última vuelta. Ahora y, sobre todo, en mis futuras batallas en clases superiores.

P: ¿Y la conducción en derrapada?

R: Es importante, pero no puedo desarrollarla mucho porque la Moto3 no tiene la potencia necesaria. Puedes derrapar un poco en frenada pero no en la salida de la curva. Lo ves, este es otro de los motivos por los que quiero irme.

Quiero evolucionar y aprender otras cosas. Necesito una moto más potente.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...