Tras 9 años pilotando la Yamaha M1 no debe ser fácil cambiar de marca, subirse a una de las motos históricamente más complejas del mundial e ir rápido a las primeras de cambio. Para ello es necesario un proceso de adaptación: de la moto al piloto, del piloto a la moto, de la fábrica al piloto y su entorno y viceversa. Multitud de factores y detalles forman un preciso engranaje que acabará determinando cada milésima de segundo ganada o perdida.
Al aterrizar sobre la Ducati, Lorenzo en seguida encontró una posición de conducción muy alta. Ya en su estreno en los test de Valencia tras finalizar la temporada 2016 vimos como los mecánicos de Ducati realizaban diversas modificaciones sobre elementos como el depósito para que Lorenzo se encontrara más a gusto. Tras la pretemporada decidieron bajar la altura de la moto, hecho que le permitía al mallorquín llegar antes con la rodilla al suelo y sentirse más cómodo pero, varias carreras después volvieron a la altura inicial y parece que hubo una mejora de rendimiento.
Tras esos cambios y el primer podio obtenido en el pasado Gran Premio de España disputado en Jerez Lorenzo ha hablado sobre la utilización del freno trasero de su Ducati y de cómo aquí podría estar una de las claves en la mejora de rendimiento: “Empecé a utilizar el freno trasero en Qatar. No estaba acostumbrado, lo empecé a utilizar porque no tenía tiempo de parar en la mayoría de las frenadas, ahora lo hago de forma más natural y lo uso más”.
“Con la otra moto que piloté durante nueve años nunca necesité usar el freno trasero, especialmente en la frenada para parar la moto. Con esta necesito usarlo, ayuda mucho más a la hora de parar la moto. Esto me ayuda a parar un poco mejor la moto, a entrar en las curvas derrapando y de forma más fluida. También es un poco menos físico, no es un acto completamente natural por el momento, pero estamos llegando a eso”.
Sobre este cambio en la forma de pilotar el piloto de Ducati espera incorporar estas modificaciones a su forma natural de pilotaje: “Tarde o temprano será algo natural para mi pilotar como lo estoy haciendo ahora, han sido nueve años haciéndolo de otra manera, sin derrapar al entrar en las curvas. Con la moto actual tengo que usar el freno trasero hasta que la cambiemos, e incluso vistos los resultados, aún cambiando la moto lo seguiré usando”.
Lorenzo y Ducati se encuentran ya en Le Mans, donde este fin de semana se disputará la quinta prueba del campeonato. Jorge es el piloto que más triunfos ha obtenido en el circuito galo con un total de cinco y, habiendo conseguido ocho podios, debería ser un factor a tener en cuenta para la carrera del domingo. Lorenzo sigue trabajando duro para conseguir aquello que pocos han conseguido.
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