A finales de 2016 el gigante indio Mahindra se hacía con Jawa, con la intención de desarrollar y fabricar motocicletas bajo el nombre y con el logo del fabricante checo. Pues bien, poco más de dos años después el fruto de esa maniobra empresarial se puede ver representado por estos dos modelos Jawa de corte clásico y con un diseño básico pero muy funcional.
En ambos casos equipan una mecánica monocilíndrica de 4T, LC, DOHC 4V, con 293 c.c. y capaz de ofrecer una potencia máxima de 27 CV.
Pese a tratarse de un motor de refrigeración líquida se le ha querido dar un aspecto retro con la inclusión de un aleteado de disipación en el bloque del cilindro. Los cromados del cárter y del colector aportan ese toque elegante de las motos de los años 50.
De las dos versiones, la Jawa y la Jawa Forty Two, que inauguran el catálogo de Jawa en esta nueva trayectoria existe una versión muy clásica, conocida solamente como Jawa, y otra con un cuadro de instrumentos más moderno, una estética no tan retro y con los detalles metálicos en aluminio cepillado en lugar de cromado.
Tampoco la parte ciclo destaca por su alta tecnología, aunque cumple con las exigencias de un motor como este monocilíndrico.
Para las suspensiones se ha confiado en un equipo estándar compuesto por una horquilla telehidráulica sin reglajes y doble amortiguador trasero, mientras que la frenada se delega a un disco delantero de 280 mm con pinza de 2 pistones y ABS y un tambor posterior de simple leva y 153 mm de diámetro.
Neumáticos estrechos -90/90 x 18” y 120/80 x 17”- y una distancia entre ejes de 1.369 mm deberían convertir, además de una altura del asiento de tan solo 765 mm, a estas dos Jawa en unas auténticas urbanitas con cualidades para escaparse por carreteras del extrarradio.
No hay noticias de su llegada a nuestro mercado, pero seguro que pronto sabremos algo al respecto. De momento, el único dato extra que conocemos es que ambos modelos rondan los 2.000 euros de precio en su país de origen, India.