Laia Sanz: "Más pronto que tarde me gustaría cambiar a las 4 ruedas"

Laia Sanz:

Laia Sanz ganó una vez más en la categoría femenina del Dakar en moto y con ello consiguió terminar por décima vez consecutiva el rally más duro del mundo. Su pareja, el campeón de España de enduro Jaume Betriu, consiguió erguirse como mejor debutante y vencedor en la categoría maratón. Ambos clasificaron por encima del top 20.

La pareja con mayores éxitos del Rally Dakar 2020 aprovechó una entrevista en Mundo Deportivo para contar sus vivencias y anécdotas de la carrera, que este año se celebró por primera vez en Arabia Saudí.

Convivencia

Ambos consideran que finalizar el Dakar y hacerlo dentro del top 20 es un buen final. Aunque aseguran que disputar la misma competición tiene sus pros y sus contras: "Cuando llegábamos los dos al final de etapa era un alivio. La parte positiva de estar los dos en carrera es que al final de cada una los dos nos hacíamos compañía. Eso sí, durante ella prefería estar ahí sola corriendo", asegura Sanz.

undefined

Siguiendo por esa línea, Laia explica como era la situación de tener a tu pareja corriendo por los mismos lugares por los que ella pasaba: "Los días que el salía delante cuando veías una moto parada por un accidente deseabas que no fuese la suya. Cuando el iba por detrás y pasabas por un sitio donde había un peligro, que no estaba señalizado en el roadbook, deseabas que le diese tiempo a verlo".

Por su parte, Jaume Betriu, relata como vivió el día que Laia se cayó y fue aturdida: “Aquel día cuando llegué al refuelling y la vi un poco tocada, sí me preocupé y estuve un buen rato rodando detrás de ella. Al acabar la etapa no se acordaba que me había visto allí. Hay cosas más importantes que la carrera y no me importaba perder tiempo”.

Competición

Tanto a Laia Sanz como a nosotros nos dolió profundamente la muerte de Paulo Gonçalves, el portugués falleció tras un fatal accidente durante la séptima etapa Dakar. "Con todo lo que ha pasado ha sido el peor año para convivir juntos en una etapa, sobre todo después de lo que pasó el primer día de la segunda semana", asegura la piloto catalana en referencia a la muerte de Gonçalves.

La muerte del portugués durante la séptima etapa del rally consternó a la piloto de Corbera de Llobregat que considera a Gonçalves como: "un ejemplo y un dakariano auténtico".

Después de eso fue una semana muy dura para ella: "Otro año hubiera luchado hasta el final para hacer el top-15, pero este año me daba igual acabar la 16 que la 20, al final quería acabar y ya está".

La prueba en Arabia Saudí no ha terminado de convencer a la pluricampeona mundial de trial y enduro para los próximos años: "Si fuese un Dakar como el del 5º o 6º día, aún me quedan muchas ganas de continuar en moto, porque siento que lo puedo hacer bien. Pero si es un Dakar como el de la segunda semana no tengo muchas ganas, porque es una cuestión de jugártela y más pronto que tarde me gustaría el cambio a las cuatro ruedas", asegura.

Este año el Dakar ha dejado muchas hechos destacables, ya que ha sido una de las ediciones más rápidas y peligrosas que recordamos de las dos últimas décadas.

Para Laia Sanz, que ha sido el décimo Dakar que corre, mentalmente considera que ha sido el más difícil: "Físicamente ha sido el Dakar menos duro de los que he corrido. No ha hecho calor, hemos tenido más tiempo de descansar al no hacer el roadbook, hemos llegado temprano a los campamentos, no ha habido tantos enlaces, las etapas han sido muy rápidas... Pero de coco ha sido el más duro".

El estado anímico fue un factor clave a la hora de apretar o acelerar en el tramo final: "Fue una segunda semana que no tenía nada que ver con las habilidades de ir en moto o la navegación o la experiencia, era importante las ganas que tuvieras de jugarte la vida y yo en ese juego no he querido entrar".

undefined

Casi les atropella una camioneta

La pareja vivió momentos de angustia cuando intentaron ser atropellados por una camioneta ajena a la carrera en la última etapa del Dakar.

Laia Sanz explicó como sucedió: "Estábamos en los últimos 15 kilómetros de la última etapa cuando vimos una pick up que venía hacia nosotros. La esquivamos y de repente dio media vuelta".

Pasó mucho miedo, pero su reacción fue instantánea: "Yo, muy asustada, me alejé apretando gas a fondo de la zona, yéndome un kilómetro más allá de lo que señalaba el roadbook. Llegué a la meta final temblando", aseguró la piloto de Gas Gas.

Aunque no es normal esa reacción, la piloto catalana encontró un posible motivo al intento de atropello: "No sé quien era, pero debía ser alguna persona local. Había granjas de camellos y a lo mejor estábamos dentro de su terreno".

Jaume Betriu ratificó el hecho que explicó su pareja, y añadió que la camioneta en cuestión estuvo a punto de arrollarle y que en ese instante pasó realmente miedo: "A mí me fue de un palmo. Me pasó a un metro", aseguró.

También quiso recordar que en otro momento también "había unos niños tirándonos piedras". Al final, por suerte todo quedó en un susto y ahora son anécdotas que pueden contar.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...