Después de realizar un evento con Yamaha en Delhi, Jorge Lorenzo viajó hasta el sur de la India, concretamente a Anantapur, para pasar dos días con de la Fundación Vicente Ferrer. Moncho Ferrer, que desde la muerte de su padre Vicente ha continuado con el proyecto junto a su madre, Anna Ferrer, acompañó al piloto en durante toda su visita. Además, Lorenzo intercambió impresiones con los voluntarios españoles que se encuetran trabajando en la India y quedó realmente impresionado con el respeto y lo que representa Vicente Ferrer en la zona.
El mismo piloto aseguró muy emocionado que "muchas veces a los deportistas nos tratan como héroes por hacer bien nuestro trabajo pero cuando ves las cosas que ha hecho Vicente Ferrer en la India y todo lo que sigue haciendo su hijo Moncho con la ayuda de tantos voluntarios te das cuenta que ellos son los héroes de verdad. Los deportistas no cambiamos el mundo, pero ellos si que lo hacen".
"Espero seguir colaborando con la Fundación Vicente Ferrer próximamente y seguro que no será la última vez que visite Anantapur. Que un español haya sido capaz de hacer algo tan grande en la India nos tiene que hacer sentir muy orgullosos y te demuestra que no hay que rendirse nunca. Ha sido una experiencia única, algo inolvidable y recomendable en todos los sentidos”, añadió Lorenzo.
Entre los actos más destacados están la visita que Lorenzo realizó al Hospital pediátrico de Bathalapalli, uno de los tres hospitales que la Fundación ha construido desde sus inicios, y la que hicieron al centro deportivo Special Olympics, donde los niños con discapacidades pudieron jugar a bádminton y a ping-pong con el piloto mallorquín.
Para acabar la primera jornada en Anantapur y Bathalapalli, Moncho acompañó a Jorge hasta el lugar de descanso del Padre Vicente Ferrer.
Durante el segundo día, Jorge Lorenzo y Moncho Ferrer llegaron hasta Atmakur, lugar donde otro mallorquín, Rafa Nadal, también colabora con una escuela de tenis, de hockey y de cricket. Allí Jorge volvió a jugar con los niños que practican deporte desde las seis de la mañana y pudo regalar algunos objetos de merchandising y camisetas.
Para finalizar dos días intensos, de mucha carga emocional, Jorge Lorenzo acudió a lo que se conoce como Centro de Artesanías, donde las mujeres fabrican con sus propias manos souvenirs y todo tipo de objetos con el fin de tener una independencia económica.
Os recomendamos que echéis un ojo a la galería de fotos de este post porque es realmente emocionante.