Kevin Schwantz, el tejano volador, el piloto que frenaba “cuando veia a Dios” y que, aun contando con un único mundial en la categoría máxima (500cc, 1993), ha sido y es uno de los pilotos más admirados y queridos de la historia, parece que cuelga las botas definitivamente.
A sus 52 años Kevin, a diferencia de la mayoría de pilotos de su generación, ha seguido manteniendo una notable actividad, ya no sólo como embajador de Suzuki, de comentarista de televisión o de instructor de su ‘Schwantz School’ en Texas, sino también compitiendo en carreras de clásicas o hasta participando en las 8 Horas de Suzuka a un gran nivel.
Durante un comparativo que realizamos con él para Solo Moto en las carreteras valencianas hace algunos años, le preguntamos si no estaba cansado de llevar este ritmo frenético y nos dijo que “No, aun no. Cuando este cansado, diré ‘basta’ y volveré a casa, pero ese momento aun no ha llegado”. Quizás ahora sí, aunque conociendo a Kevin, no creemos que se quede en casa del todo…
Esta es la carta que nos ha hecho llegar, dedicada a todos los asistentes del Goodward Revival:
“A mis seguidores presentes en el Goodwood Revival del 9 al 11 de septiembre :
Os pido disculpas por esta decisión de último momento, pero después de meditarlo mucho he decidido que ya no quiero competir en asfalto en ninguna categoría, y por lo tanto, no asistiré al Goodwood Revival, como estaba previsto inicialmente.
Recordando cuando me retiré de las carreras de GG.PP. en 1995, esperé hasta el último momento, tratando de convencerme de que todo iba a ir mejor, y justo antes de ir al aeropuerto para disputar la cuarta carrera de la temporada, he tomado la decisión de que ya no quería jugarme el tipo durante más tiempo. Llamé a mi equipo y les dije que no iba a venir y que me retiraba, irónicamente y sin yo saberlo en ese momento, con 34 puntos.
Me resulta imposible subirme a una moto y correr sólo por diversión. Yo quiero pilotar hasta el límite e intentar ganar, pero ya no quiero correr más riesgos.
Espero que respetéis mi decisión y que, a pesar de mi ausencia, disfrutéis de un fantástico fin de semana, como el que Lord March y su equipo del Goodwood siempre os ofrecen.
Atentamente,
Kevin Schwantz”