Kawasaki ER-6N: Mejorando lo presente

El mercado naked cada vez tiene más representantes. Al ser una de las categorías con más adeptos de los últimos tiempos, los fabricantes se han volcado en ofrecer una gran gama de posibilidades. Desde monocilíndricas hasta tetracilíndricas, con distintos niveles de acabados y para cualquier tipo de usuario. La Kawasaki ER-6N se caracteriza por ser capaz de complacer desde al novato que estrena su primera moto grande hasta un motero maduro que precisa de una motocicleta efectiva y funcional, que esté a la altura de una dilatada experiencia al manillar.

Lo primero que salta a la vista es la renovación estética a la que ha sido sometida. Siempre conservando sus rasgos característicos, se han rediseñado algunas partes para modernizarla un poco. Las tapas laterales se han estilizado para otorgarle una apariencia más moderna a la vez que musculosa. El frontal con la doble óptica superpuesta se ha modificado. Ahora esta óptica resulta mucho más elegante a la vez que moderna, con luces de posición dobles y recolocadas en la parte superior.

El depósito se ha estrechado en su parte inferior, con lo que se gana espacio para las piernas y es más fácil moverse encima de ella. El chasis ha quedado más a la vista, con lo que adquiere protagonismo, y el colín se ha retocado por completo, con nuevas asas de aluminio para el acompañante, mucho más funcionales. El asiento es más estrecho, siguiendo la línea del deposito, eso sí, su mullido, un tanto duro, castigará las posaderas después de algunas horas.

El piloto trasero está mucho más integrado en el colín y estrena iluminación por leds, además los intermitentes son más estilizados y elegantes. Detalles como los tensores de cadena o las torretas que sujetan el manillar están más cuidadas estéticamente. Todo el conjunto ha ganado en elegancia y calidad de acabados, la nueva ER-6N puede alardear de ser una de las siluetas más compactas y mejor terminadas de la categoría.

La puesta de largo del modelo se realizó en Mallorca, sus reviradas carreteras fueron un perfecto escenario para poner a prueba las novedades de la nueva Kawasaki. Los cambios anunciados en la respuesta del motor son notables con tan sólo poner primera y arrancar. El bicilíndrico en paralelo de 650 cc de refrigeración por líquido y con distribución DOHC es ahora mucho más cómodo de usar. La inyección ha sido mejorada con el resultado de un carácter más dulce a bajas vueltas. Esto se traduce en una respuesta más plana y controlable desde prácticamente las 2.000 rpm y hasta el corte de encendido.

El propulsor rinde 72 CV y permite aprovechar toda la curva de potencia sin baches ni tirones hasta las 10.000 rpm, empujando con empeño. Otra buena noticia: las vibraciones no serán un impedimento, pues brillan por su ausencia, éste es otro de los cambios mejorados del nuevo modelo. Esto se ha conseguido con la incorporación de nuevos silentblocks entre el motor y el chasis, además de nuevos contrapesos y anclajes del manillar. Donde más se nota el cambio es en tramos de autovía, a una velocidad considerable, donde suelen aparecer lasvibraciones en el manillar o estribos.

La nueva ER, como si de una cuatro cilindros se tratara, permite realizar trayectos largos de este tipo sin la más mínima molestia. El propio diseño de la motorización, en configuración en paralelo, posibilita una estrechez del bastidor y de todo el conjunto imposible en modelos de más cilindros.

¿Quieres saber cómo se comportó la ER-6N en su primer reto? El número 1.689 de Solo Moto te espera en el quiosco con toda la información sobre esta nueva Kawasaki.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...