Jorge Lorenzo acabó la temporada 2017 demostrando que, pese a los duros momentos pasados sobre la Ducati, en 2018 puede ser un gran aspirante al título de MotoGP. Y en su empeño por hacer que sea realidad, el mallorquín recupera a su anterior coach, Álex Debón.
Álex se retiró del mundo del motociclismo para dedicarse a los caballos, pero no ha podido resistirse a la llamada de Lorenzo. Debón ya fue consejero del cinco veces campeón del mundo en las temporadas en que consiguió sus dos primeros títulos mundiales, en la categoría de 250 c.c.
Pese a que Jorge Lorenzo también confía mucho en Michele Pirro, con Álex Debón le une algo más que las motos, les une una amistad que hace que se conozcan bien, y Lorenzo confía plenamente en sus ideas. Ya hemos visto lo que son capaces de hacer juntos, y no podemos hacer más que alegrarnos por el mallorquín porque estamos convencidos de que este tándem funcionará bien.
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