El fabricante sueco de motos eléctricas CAKE anuncia su nuevo motor eléctrico de altas prestaciones, Jante, más sofisticado potente y ligero.
Las especiales y elitistas motos eléctricas CAKE se caracterizan por un diseño fuera de lo común, por su elevada calidad de componentes y por un precio final más allá de lo habitual.
Pero ofrecen productos realmente exclusivos que ofrecen muy buen rendimiento, y ello es gracias a su estudiada ingeniería y a la potencia y eficacia de sus motores y baterías.
Para seguir mejorando ahora en CAKE presentan su nuevo motor eléctrico Jante de imanes permanentes (IPM), que gracias a su construcción de flujo radial ofrece más potencia y ligereza.
Fabricado con una carcasa de aluminio de grado aeronáutico y un eje de doble rodamiento, tiene una clasificación IP67 y es capaz de ofrecer más de 500 Nm en la rueda trasera, una barbaridad.
Así, el Jante ofrece una aceleración suave y un manejo preciso a bajas velocidades, un peso más reducido, más par motor, mayor durabilidad y un diseño aún más compacto y ligero.
Según Stefan Ytterborn, CEO y fundador de CAKE, «el Jante representa un avance significativo en el diseño del motor eléctrico de CAKE, proporcionando a nuestros clientes un producto superior que satisface sus necesidades de rendimiento, eficiencia y confiabilidad».
Os preguntaréis qué significa Jante. Como es habitual en la marca, es una palabra sueca y significa la humildad de una persona exitosa que no alardea de sus triunfos, tal es la personalidad que desean que transmita este motor, éxito y prestaciones a la chita callando.
Este motor Jante ya está presente en su última moto off road, la Bukk, su primer modelo configurable a gusto del cliente, y pronto se extenderá al resto de sus modelos.
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