A pesar de ser una moto de competición, la Indian Buffalo Chip de Roland Sands mantiene el mismo refinamiento que las demás realizaciones del mago californiano. El propio Roland participa con ella en el campeonato Super Hooligan National y se manifiesta asombrado por la fiabilidad de su Indian, basada en la Scout:
“Sinceramente, desde el primer día todos nos preguntamos cuánto tiempo durarían los motores Indian de la Scout Sixty, sabiendo cómo serían tratadas nada más salir de sus cajas y la vida que tendrían luego, una vez abiertas. No es cómo la mayoría de la gente suele tratar una moto recién estrenada... Después de todas las pasadas de vueltas y maltrato que significa competir en la Hooligan, sinceramente, nunca hemos tenido que hacerles nada a ninguno de los motores de estas motos. Estamos muy impresionados, y todavía estamos intentando romperlos... Estas Sixtys Scout han demostrado ser, una y otra vez, fuertes y capaces de aguantar palizas repetidamente, con un mínimo mantenimiento”, admite un admirado Roland Sands. “Después de cada carrera, tan sólo hay que cambiar el filtro de aire K&N y los neumáticos Dunlop DT3 por el lógico desgaste... eso es todo, fuera de lo que hayamos doblado o roto por caídas. Exactamente lo que la mayoría de nosotros quiere de una moto: que puedas disfrutarla conduciendo, más que trabajando en ella”.
La Indian Scout Buffalo Chip de Roland Sands dispone de unas llantas de aleación más ligeras, obra de la propia RSD, manillar off road, suspensiones dedicadas y escape también elaborado por Roland Sands Design, el filtro es un K&N y se ha eliminado el corte de encendido, todo ello, como siempre, combinado con piezas propias, como estriberas, manetas, pintura, etc., con la habitual calidad de la factoría de Sands.