Pues sí, Góis existe, y digo esto porque después de 22 ediciones y haber hablado con muchos moteros sobre esta concentración, todo el mundo ha oído hablar de ella pero nadie la conoce.
Esto mismo es lo que me pasaba a mí hasta que el año pasado me decidí, por fin, a acudir, y me encontré con una de las mejores concentraciones veraniegas de cuantas he acudido en mi vida, y he ido a un par de ellas…
Pero si es tan buena ¿por qué se conoce tan poco en nuestro país? Esto mismo les pregunté a los organizadores, que me respondieron que hasta la fecha los esfuerzos por que su concentración se conociese internacionalmente habían sido prácticamente nulos. Os voy a dar un dato interesante, la concentración de Góis supera en número de inscritos portugueses a la de Faro desde hace muchos años: y es que Faro cuenta con más del 60% de inscritos extranjeros (una gran mayoría españoles), mientras que la de Góis apenas cuenta con un 10% de inscritos extranjeros.
Si lo principal de acudir a cualquier evento es disfrutar de nuestra moto, la Concentración de Góis nos dejará satisfechos aun antes de inscribirnos, ya que los diferentes caminos que llegan hasta ella nos obligan a circular por kilómetros de preciosas carreteras de curvas, encajonadas entre montañas, que satisfarán al más aficionado a usar el cambio de marchas.
El centro neurálgico de la concentración se encuentra justo al lado del pueblo, por lo que se puede ir andando de uno a otro sin tocar la moto, como andando se puede ir a uno de los principales atractivos que tiene esta concentración: sus playas fluviales, donde poderte dar un baño o tomarte una copa con los pies metidos dentro del agua en, o junto a algunos de los chiringuitos que hay en su margen.
La concentración en sí está dividida por el río Ceira, y en su margen derecha se encuentra una larga calle en la que se sitúan todos los expositores. Un largo paseo en el que poder comprar todo tipo de accesorios para el motorista, tatuarse, tomarse un licor típico portugués, probar alguno de sus excelentes dulces, etc.; en el otro lado se encuentra el escenario principal, la carpa electrónica y la oferta gastronómica.
El paraje en sí resulta muy atractivo y el río, los árboles, los puentes para pasar de un lado a otro le confieren una identidad propia muy característica y especial.
Mi conclusión en lo que respecta a esta concentración es que es una excusa perfecta para coger la moto y asistir; las posibilidades que tanto el recinto de la concentración, el río con sus playas fluviales, la oferta gastronómica y turística del pueblo, el turismo que realizar por toda la comarca y la montaña rusa de carreteras entre bellos paisajes que sí o sí nos vamos a encontrar para llegar, bien lo merecen… además habrá conciertos desde el jueves, bike show, zona comercial, exhibiciones y todas esas cosas típicas de cualquier buena concentración.
Como apuntes añadidos solo decir que no es necesario coger ni una de las autopistas de pago portuguesas y que la gasolina apenas es un poco más cara que en España. Si te decides, allí nos vemos.
La concetración de Góis tendrá lugar del 18 al 21 de agosto y su precio es de 25€. Para más información podéis visitar la página web de los organizadores, el Góis Moto Clube.