La Honda X4 Transformer de RH Customs

La Honda X4 Transformer de RH Customs

En la web de RH Customs, responsables de esta preparación, pone: "Fabricamos y diseñamos motos a medida por encargo", pues queda claro de que es fan el cliente que haya pedido esta Honda X4 Transformer.

Concretamente está inspirada en Bumblebee, un autobot que se transforma en coche, inicialmente en un Volkswagen Escarabajo aunque luego pasó a un Chevrolet Camaro, y que cuenta con película propia.

Viendo el resultado final no hay duda que en RH Custom no han ido con sutilezas pero reconocemos que han seguido el espíritu Transformer  en esta preparación.

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Y es que no resulta nada fácil intuir que debajo de la excéntrica carroceria hay una Honda X4, un modelo custom de finales de los noventa que representaba la respuesta de Honda a la bestial Yamaha V-Max.

Plantándole cara con sus mismas armas, ya que la Honda X4 incorporaba un enorme motor de 1.300cc 4 cilíndros en línea, aunque solo proporcionaba 100 CV frente a los 140 de la Yamaha.

Esta menor potencia junto a otros problemas como la falta de estabilidad a alta velocidades y un elevado consumo no le ayudaron en las ventas, cesando su producción en 2003.

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Tras quitar todos los elementos secundarios de la Honda X4 manteniendo el motor, chasis, horquilla, basculante y frenos, se ha trabajado mucho para adaptarla a la nueva carrocería.

Adoptando un carenado espectacular en el que destaca la recreación de la cabeza del Transformer Bumblebee a modo de faro, incluyendo iluminación LED en los ojos de la máscara.

También hay que destacar el trabajo de pintura, una conseguida tonalidad amarilla con detalles desgastados que combina con las partes metalizadas inspiradas en las tapas de culata del Chevrolet Camaro SS.

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Muchos cambios

Si todo esto no fuera suficiente los chicos de RH Customs ha seguido con muchos cambios sobre la Honda X4, como las llantas de radios o el nuevo escape artesanal.

Se ha neliminado muchos componentes de la parte trasera para transformarla, nunca mejor dicho, en monoplaza, dando protagonismo al enorme neumático trasero que incorpora.

Lástima que a nuestro parecer todos estos cambios pasan algo "desapercibidos" ante el exceso de la recreación de la cabeza del Tranformer a modo de faro de la moto.

Pero si el propietario está contento... quien sabe si el próximo encargo puede ser una Triumph Rocket III Optimus Prime o una BMW R18 Megatron.

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