Referentes del motocross y supercross, los austriacos de KTM renovarán completamente su gama tanto de 4T como de 2T de cara a 2023. Incluyendo la aparición de una inédita SX 300 entre las motos animadas por propulsores de 2T. Y esta es sólo la guinda del pastel a una profunda renovación que no se llevaba a cabo desde 2018.
Lo primero que salta a la vista es la nueva estética, aunque desde luego no es lo más importante. Las fibras son más estilizada y robustas al mismo tiempo, con una ligerísima reubicación de la posición de conducción al adelantarse ligeramente los estribos. Las aletas del guardabarros delanteros han diseñado para reducir la suciedad y barro que alcanzan al piloto y al radiador.
En el apartado motriz, las SX 2T 125, 200 y 300 incorporan en primicia la inyección electrónica TPI Dell´Orto (la misma que las enduro EXC de la firma), arranque eléctrico y válvula de escape electrónica, en lugar de mecánica. También se presentan dos mapas de motor, que se pueden escoger sobre la marcha. Para la “trescientos” se declara una potencia de 57 CV para un peso del motor de 23,9 kg.
Las mejoras en el apartado motor de la saga de 4T, las KTM SX-F 250, 350 y 450, no es tan visceral. Las culatas y los sistemas de escape han evolucionado para aumentar el rango de utilización de la potencia; y la caja de cambios Pankl de 5 velocidades se rediseña para ofrecer mejor tacto a la hora de cambiar de marcha. Para ello se han aligerado algunos de sus componentes internos.
También es inédito un sistema de cambio rápido o quicksifher de serie, que es desconectable, para subir velocidades sin cortar gas y que actúa desde la 2º a la quinta velocidad. Para la “cuatro y medio” se declaran 63 CV de potencia máxima, mientras que para la “dos y medio” son 47 CV.
En cuanto a la parte ciclo, hay también cambios suculentos en las gamas de 2T y 4T. Para empezar, en esta última el motor se inclina hacia atrás 2º para contrarrestar el efecto anti-squad, o hundimiento controlado del tren trasero al acelerar. Se centralizan masas y mejora la manejabilidad.
Y en general, todos los chasis han sido completamente revisados. Tanto en sus formas en algunos tramos, como en el espesor de los tubos de acero y sus soldaduras por robot. Buscando mayor rigidez del conjunto.
Otras mejoras afectan al basculante de aluminio, más ligero, y al subchasis. Este está fabricado en acero y poliamida. El soporte del amortiguador, y el propio amortiguador, son completamente nuevos. Es más corto e incorpora nuevos reglajes internos. Y las bieletas también han sido rediseñadas. Por su parte la horquilla de 48 mm recibe mejoras para aumentar drásticamente su funcionamiento en los últimos 40 mm de recorrido.
Me gusta la sx 300cc pienso que con esa moto se disfrutaría a lo máximo en mx
Larga vida a los dos tiempos