Herido de extrema gravedad desde su gravísimo accidente en el pasado TT 2022, ayer falleció Olivier Lavorel, el copiloto del sidecar pilotado por Cesar Chanal.
Aunque en el momento del accidente la organización dio por muerto a Lavorel en lugar de a Chanal, por una confusión en la identificación de ambos, luego se supo que el copiloto francés era el que había sobrevivido, aunque en condición de extrema gravedad.
Inicialmente fue atendido en el hospital de Douglas, la capital de la Isla de Man, para días más tarde ser trasladado a Francia, donde finalmente ha fallecido cinco meses después.
Esta edición 2022 del Tourist Trophy ha sido especialmente trágica, ya que con Olivier Lavorel la cifra de fallecidos del popular evento se eleva a seis. En este último TT, además del compañero de Lavorel, Cesar Chanal, también perdieron la vida Mark Purslow, Davy Morgan, Roger Stockton y Bradley Stockton, estos últimos padre e hijo, compitiendo también en la categoría Sidecar TT.
Un triste promedio
Siempre discutido por la terrible media de fallecidos (2,5 muertos por cada TT), el Tourist Trophy acumula 266 victimas mortales desde su primera edición en 1911. En esta última el triste promedio se ha duplicado sobradamente.
El TT fue puntuable para el Campeonato Mundial de Motociclismo hasta 1975, tras un fuerte boicot de los pilotos en 1973, encabezados por la poderosa figura de Giacomo Agostini. Y es que los pilotos del Mundial no querían seguir corriendo en un circuito tan largo y que no reunía las mínimas condiciones de seguridad. La muerte de Santiago Herrero en 1970, tras su accidente en la famosa milla 13, ya había levantado las protestas de los pilotos.
Sin puntuar para ningún campeonato, el TT ha seguido adelante como evento único, aunque englobado dentro de las llamadas ‘Road races’ (carreras en carretera), y sigue siendo tremendamente popular, precisamente por su carácter único, congregando cada año a miles de espectadores.