No, no es una idea nueva, por mucho que lo parezca. Las motos con “los pies por delante”, en inglés FF –feet forward-, aparecieron allá por la década de los sesenta, de la mano de un tal Craig Vetter, el famoso diseñador que en 1980 creó la Mistery Ship, la Triumph Hurricane de 1973 o su famoso carenado semi integral Windjammer.
Otro antecedente de esta Exodus es la curiosa Quasar de mediados de los setenta, una moto que la Exodus copia fielmente…
La empresa americana Suprine se ha lanzado a crear y diseñar un nuevo tipo de moto, la Exodus, cuya longitud total supera los dos metros… El piloto va sentado muy bajo, con las piernas por delante, encerrado en un chasis tubular –está dentro del chasis, como en un coche- y detrás de su espalda se ha colocado un motor de moto, concretamente de una BMW K 1200, un tetracilíndrico en línea longitudinal. La transmisión final es popr cardán, y usa el mismo conjunto de la K1200 –motor y cardán en un bloque han sido trasplantados a este invento-.
¿Qué beneficios reporta este invento? El principal es su bajo consumo, ya que es capaz de recorrer 100 kilómetros con menos de tres litros de gasolina, por increíble que parezca. Ello es debido a que la penetración aerodinámica es casi ideal, ya que hay muy poca superficie frontal –un 50% menos que en una moto-, es estrecha y baja, a pesar que la bascula marca los 300 kg…
¿Y qué inconvenientes tiene? Pues que evidentemente, rodando entre coches no ves más que el parachoques del coche que tienes delante –es demasiado baja-, no te puedes colar entre coches cuando están parados –es bastante larga-, a la hora de parar tienes que sacar las piernas por un hueco que hay en los laterales y que en caso de accidente no tienes posibilidad de saltar e intentar salvar que tu cuerpo reciba un impacto directo, como sí ocurre con la moto.
De momento no seremos nosotros los que nos pongamos en la lista de espera para comprar una moto que costará la friolera de 55.000 dólares…