En un tiempo donde proliferan los modelos que apelan al vanguardismo y el futuro electrificado, la marca japonesa propone la vuelta de la Kawasaki Eliminator. Y en dos versiones, estándar y SE.
El nombre llegó al mercado en 1985 en la forma de la Eliminator ZL900 A1, y sabemos de su regreso por la revelación de este nuevo modelo en el Osaka Motorcycle Show.
La futura Eliminator estará animada por un propulsor bicilíndrico en paralelo con refrigeración líquida. Es el mismo que actualmente anima las Kawasaki Ninja 400 y Z400. En consecuencia, cumpliría perfectamente con la normativa anticontaminación vigente y podría comercializarse en Europa, y por extensión, en España.
Un propulsor que, ciertamente, dista del poderoso cuatro cilindros en línea propuesto en los años 80 del siglo pasado. Pero es que las tendencias han cambiado en gran medida, y las motos “racionales”, con potencias dentro de las especificaciones del A2, tienen hoy día mucho tirón.
A nadie se le escapa que con la vuelta de la Kawasaki Eliminator la marca de Akhasi está proponiendo una contendiente directa a la Honda CMX500 Revel, por poner el ejemplo más exitoso del segmento. Y así también se distancia de la que pudiéramos considerar su antecesora, la Kawasaki Vulcan 650.
Al igual que ocurre en la moto del Ala, Kawasaki recurre a un bastidor tubular de acero, y monta llanta delantera de 18” y trasera de 16”. Llama la atención la posición casi horizontal del amortiguador trasero, que va anclado directamente al basculante.
Por su parte, las diferencias entre las versiones expuestas, estándar y SE, radican en la incorporación, por parte de la segunda, de un embellecedor del grupo óptico delantero, fuelles de horquilla (que es convencional), y algunos componentes electrónicos adicionales. Son el GPS, conector USB-C y cámaras (de video) instaladas en la parte frontal y la zaga. Las cuales se conectan a un sistema de grabación de video. Algo completamente inédito en una moto japonesa, y que sí hemos visto con proliferación en las de origen Chino. Otro sistema de conectividad, o el control de tracción, no son ajenos a sus especificaciones.
Ergonómicamente, llama mucho la atención la ubicación de los reposapiés, muy en el centro de la moto. Esto marca una clara tendencia hacia el concepto polivalente, más «naked» que cruiser (en cuyo caso estarían más adelantados), muy en línea con las tendencias actuales. Otra vez no podemos dejar de fijarnos en este sentido en la Honda CMX500 Revel.
Con todo, la vuelta de la Kawasaki Eliminator casi podemos darla por hecha. Lo que no sabemos todavía es cuando podría comenzar su comercialización. Quizá para después del verano, o ya como modelo 2024 el próximo año.
Transmisión por correa, por favor, como aquellas Vulcan 500 de los ’90. Sería un puntazo. Me encanta.