Desplazarse con un scooter eléctrico es, además de más ecológico, infinitamente más barato, y es que si quieres saber cuanto cuesta hacer 100 km con un scooter eléctrico solo tienes que seguir leyendo...
En nuestros muchos años de pruebas con motos y scooters eléctricos, y de motos y scooters con motores de gasolina, acumulamos el suficiente know how como para asegurar que la movilidad eléctrica ahorra mucho dinero a nuestro bolsillo.
Y ya no es solamente un tema de pura ecología, sino que es un ahorro real, factible y mesurado, aunque con matices, y eso es cierto. Puedes visitar nuestro artículo sobre la autonomía de las motos eléctricas si estás pensando en comprar uno.
La comparativa de consumos entre un scooter de gasolina de 125 c.c. (L3) y otro eléctrico equivalente a 125 c.c. (L3e) se decanta claramente hacia el eléctrico.
Si, en cambio, comparamos precios de compra, el scooter eléctrico es más caro que el de gasolina, pero, nuevamente, aquí hay matices que enjuagan ligeramente la diferencia.
Un tercer apartado en el que el scooter eléctrico también supera al de gasolina es en el de mantenimiento, ya que en el eléctrico no hay cambios de aceite, ni de filtros, ni de correas, ni de variadores. Por lo tanto, es más económico, mucho más. Vamos a sopesar los pros y contras de cada apartado, consumos, mantenimiento, precio de compra, recarga y degradación de batería.
Hablando de consumos un scooter eléctrico -no un ciclomotor- eficiente necesita de media unos 6 kWh para hacer 100 km -ciudad, carretera y algo de autovía-; para hacer un centenar de kilómetros con un scooter de gasolina de 125 c.c. necesita unos 2,8 litros.
Para trasladar esto a dinero en el caso del scooter de gasolina es fácil: con un precio de 1,7 eur/l hacer 100 km tiene un coste de unos 4,76 euros.
En cambio, para hacer este cálculo en el scooter eléctrico hay que hablar de tarifas eléctricas, ya que la oferta de precios es muy variada.
Si evitamos la tarifa de carga eléctrica de hora Punta (P1) -la más cara-, y cargamos con la tarifa de hora Valle (P3) más barata de 0,175 el kWh -el precio medio más habitual, con el tope del gas incluido- llenar una batería de 6 kWh cuesta solamente 1 euro -redondeando.
Pero aún puede ser más barato, porque una comercializadora en nuestro país ofrece un precio irrisorio en hora Valle -aunque muy caro en hora Punta-, por el que llenar 6 kWh cuesta solamente ¡18 céntimos de euro!
Y para los que aseguran que la electricidad de las suministradoras es contaminante, solo decirles que la electricidad contratada está certificada como “verde” por muchas compañías, y es que en nuestro país ya más de un 50% de la electricidad producida proviene de fuentes renovables.
En este punto, para scooters L3 equivalentes en prestaciones y calidad, el precio de un scooter de gasolina de la categoría L3 es más barato que uno eléctrico. Aún restando la ayuda del Plan MOVES III para el eléctrico, hay una diferencia a enjuagar.
Hemos hecho unos cálculos aproximados de coste de mantenimiento, sin contar coste de seguro, neumáticos o pastillas de freno, que sería prácticamente idéntico en ambos casos -en el eléctrico, gasta algo menos de frenos.
Para el scooter de gasolina hemos contabilizado horas de taller y consumibles (filtros, recambios, aceites, etc.), y en el eléctrico solo horas de taller de inspecciones casi visuales -no hay consumibles a sustituir-. Una revisión anual en un scooter de gasolina oscila entre 100 y 120 euros, si no hay sustituciones mayores (embrague, poleas, rodillos, etc), y puede elevarse hasta los 170 euros en kilometrajes elevados.
Para el scooter eléctrico, gracias a Ray Motors, sabemos que una inspección anual de un scooter eléctrico no lleva más de 30-35 minutos -si no hay sustitución de componentes-. Si contamos un coste medio de mano de obra de 60 euros la hora, una revisión anual de un scooter eléctrico tiene un precio de unos 35 euros.
Sí, con un scooter de gasolina ir a la gasolinera y hacer el lleno es inmediato; aquí no hay discusión. Pero con un eléctrico puedes hacer recorridos urbanos a diario, inferiores a los 80 km, y con una batería extraíble se puede cargar en casa durante la noche. Por lo que al día siguiente sales con la batería de nuevo al 100%. Sí, es algo más engorroso, pero la recarga no debería representar más que una molestia.
Aquí, de nuevo, el scooter de gasolina tendría ventaja, pero una buena batería de un scooter eléctrico tiene una vida útil media de unos 10 años, ya que en una década aún debe conservar un 70% de su capacidad de carga. Tendrás menos "depósito de electricidad", pero ello no significa que deje de funcionar.
Además, un scooter urbano L3 con 10 años, aunque sea de gasolina, también se degrada: no sufre degradación de batería sino que sufre degradación de motor... Por ello en este caso yo lo dejaría en empate.
Haciendo números, con un menor consumo y menor coste de mantenimiento, la diferencia de precio entre un scooter eléctrico y uno de gasolina se amortiza en 4 años, si realizas 5.000 km al año. Si realizas 10.000 km al año queda amortizado en dos años.
Y a partir de aquí, el menor coste de consumo y mantenimiento del scooter eléctrico no significa otra cosa que amortización del precio del scooter.
La juventud del parque de scooters eléctricos aún impide tener pruebas fehacientes, pero si las empresas de delivery confían en ellos por algo será...
