El pasado viernes tuvimos la ocasión de coincidir, por primera vez desde que fuera nombrado por segunda vez director general de la DGT, con Pere Navarro. Fue durante el 24º Foro Barcelona de Seguridad Vial, que en esta edición llevaba por título "Motorista, queremos tu seguridad".
Fue una mañana intensa dedicada a hablar y analizar la siniestralidad de las motos, evaluar su evolución y poner de relieve la vulnerabilidad de los motoristas. Y fue en este contexto en el que se habló de las dos propuestas de las que hablamos en el titular, y que habréis visto en varios medios de comunicación.
Antes de entrar al trapo, sin embargo, hay que tener en cuenta una de las frases que pronunció el propio director de la DGT durante la presentación institucional de la jornada. "Es importante generar debate entorno a la Seguridad Vial, sólo el hecho de que haya debate social nos ayuda a reducir los siniestros. Luego, el debate tiene que ir acompañado de medidas para que el discurso sea creíble".
En este sentido, debemos distinguir pues entre los "nos gustaría" o "es nuestro deber intentarlo" de los "vamos a".
Cuando habló de bajar a 90 km/h la velocidad genérica de las carreteras secundarias, por ejemplo, Navarro usó un "vamos a". En cambio, cuando habló de reducir la siniestralidad de las motos en ciudad y afirmó que "la mejor manera de hacerlo es reducir a 30 km/h la velocidad genérica en las calles de un sólo carril", usó un "nos gustaría" para cerrar la frase.
En este sentido, el de la velocidad genérica en vías urbanas, Navarro concretó en un aparte con la prensa durante el cofee break que Barcelona ha sido pionera en ello, y que la han seguido otras ciudades como Madrid o Bilbao. "Debería ser una norma general que implique un cambio de mentalidad. La velocidad por defecto debe ser 30 km/h, y si hay vías donde hay una excepción se señaliza. Al revés de lo que pasa ahora, que la genérica es 50 y lo que se debe señalizar es el 30 km/h".
Navarro también sugirió a los Ayuntamientos que abran oficinas de la motocicleta. "Vemos como se van creando oficinas de la bicicleta, para apoyar, fomentar y hacer más segura la movilidad en bicicleta, pero la movilidad en motocicleta es mucho mayor y por tanto sería interesante disponer de una oficina de la motocicleta".
Respecto a la reducción de la tasa de alcoholemia para los motoristas, quien propuso la medida fue Jorge Ordás Alonso, subdirector general de Movilidad y Tecnología de la Dirección General de Tráfico, en el tramo final de la jornada, durante el turno de preguntas de la mesa redonda en la que participó.
"Nuestro deber es intentarlo", dijo Ordás respecto al tema de reducir a 0,0 la tasa de alcohol en conductores de motocicletas. Así pues, confirmaba que la DGT ve con buenos ojos una medida que instituciones como RACC y Guardia Urbana llevan años solicitando. En este sentido, Juan José Vilanova, Intendente Mayor de la Guardia Urbana de Barcelona, afirmó que para ellos este asunto es un "debate superado", en referencia a que ya debería estar en vigor.
Desde aquí, que no sea dicho que no participamos en el debate si esto puede de alguna forma ayudar a reducir la siniestralidad, nos sumamos a la tasa de alcohol 0,0, pero lógicamente no sólo para motoristas, conductores noveles o profesionales. La tasa de alcohol debe ser 0,0% para todos y cada uno de los conductores que circulan por nuestras vías. Porque los usuarios vulnerables, lógicamente, debemos extremar la precaución y la atención, pero del mismo modo y con más conciencia sobre nuestra posible presencia deben hacerlo el resto de conductores.
Así que, para todos, tasa de alcohol 0,0.