Ha tardado más de lo deseado, pero parece que por fin Tenerife va a tener su tan asiado circuito de velocidad. Y es que las obras de construcción del futuro Centro Insular del Motor se iniciarán de manera “inminente”, a partir del 29 de agosto, tras solucionarse definitivamente y de forma favorable todos los trámites burocráticos necesarios para ello y se ponga la primera piedra del mismo.
Fue hace poco más de un año, en mayo de 2015, cuando el Consejo de Gobierno del Cabildo adjudicó el desarrollo del Centro Insular del Motor y su acceso norte por 30 millones de euros.
El futuro complejo se encuentra en la zona de Los Duques, en Granadilla de Abona, y la explotación del mismo durante 35 años, prorrogables por otros cinco años más, correrá a cargo de la sociedad mercantil Onda Rossa SL, integrada a partes iguales por Kiti Trans SLU, la empresa adjudicataria de las obras, y Axia SRL, quien las ejecutará. Asimismo, el italiano Walter Sciacca, responsable en el pasado del autódromo de Vallelunga y del circuito internacional Enzo e Dino Ferrari de Imola, será el primer director del Circuito del Motor de Tenerife.
El proyecto supone una inversión de 23,8 millones de euros, aproximadamente, de los cuales 21,4 se destinarán a la ejecución del circuito, mientras que 2,4 irán para hacer el acceso norte. A estas cuantías hay que sumar los 240.000 euros que implica la adquisición de los terrenos para la entrada sur, entre otras mejoras propuestas por la adjudicataria.
El plazo de ejecución del ansiado Centro Insular del Motor, en la zona de Atogo, será, en principio, de 21 meses y la superficie total del complejo será de más de 1,3 millones de m2 procedentes de una agrupación de fincas adquiridas por el Cabildo.
El Circuito del Motor de Tenerife es, sin duda, la joya de la corona del proyecto. Con una longitud de 4.067 metros y una recta principal de 819 metros, contará con un total de diez curvas a izquierdas y otras cinco a derechas, todas ellas de hasta 12 metros de ancho. Habrá 6.500 plazas de aparcamiento y 4.000 asientos para público asistente. Para los equipos, habrá espacio para 2.000 coches, 60 autobuses y 20 camiones.
El sentido de circulación será contrario al de las agujas del reloj y, de acuerdo con las estimaciones que los ingenieros han podido obtener en los simulares virtuales, podría permitir velocidades media de hasta 180,19 km/h; con puntas de 312 km/h en una recta principal que tendrá 16 metros de ancho.
La empresa concesionaria cederá el uso del circuito por un determinado número de días al año al Cabildo, que se coordinará con las escuderías y federaciones para la celebración de pruebas. Por cierto, las autoridades tinerfeñas aseveran que los motoristas de la isla serán quienes hagan un mayor uso del mismo y afirman que esta nueva instalación marcará "un antes y un después" para ellos.