Abuelos al manillar. ¿Cuándo colgar las botas?

Abuelos al manillar. ¿Cuándo colgar las botas?

Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) en España el 12% de los conductores de moto en 2018 eran mayores de 65 años. Ahora seguro que son algunos abuelos al manillar más.

Como todos sabemos, la juventud es una enfermedad sólo el tiempo cura y tarde o temprano todos vamos mejorando hasta terminar nuestros días rebosantes de salud y sin un solo achaque. Lástima que no podamos contarlo.

A lo largo de ese inevitable proceso hay costumbres, aficiones e incluso obligaciones que inevitablemente habremos de ir dejando atrás, por comodidad o por impotencia. Los años pesan y cada vez cuesta más cargar con ellos.

Lo de cabalgar a dos ruedas es una pasión que, como todas, puede permanecer intacta a pesar del paso de las primaveras. Pero incluso los amores más intensos tienden a languidecer, máxime cuando el vigor de la mocedad va perdiendo impulso.

undefined

En muchos casos pretendemos alargar esa experiencia de conducción – ya no diré pilotaje – más allá de nuestras capacidades y las consecuencias pueden llegar a ser desastrosas. Sin embargo nos cuesta reconocer la merma de aptitudes para seguir manteniendo el equilibrio y salir indemnes de la aventura que ya supone ponerse al manillar de nuestra querida montura.

Normalmente son voces externas las que nos advierten de que ya es hora de ir pensando en dar un descanso al casco y los guantes. Pero curiosamente no son las autoridades pertinentes las primeras en avisar, ellas que todo lo controlan. La DGT no marca una edad máxima para dejar de conducir.

Según datos de este organismo, en España hay un millón de personas que conducen con edades entre 65 y 69 años, 700.000 aproximadamente de 70 hasta 75 años y unos 500.000 que siguen circulando con más de 76.

undefined

El permiso de clase A, para conducir motocicletas, tiene que renovarse cada 10 años hasta los 65 y, a partir de entonces, cada 5. El trámite es muy similar al realizado antes de llegar a esta edad, simplemente hay que acudir a uno de los Centro de Reconocimiento de Conductores autorizado pasar el reconocimiento médico y pagar la tasa de tráfico (los mayores de 70 años están exentos de pagarla).

Pero si en el centro de reconocimiento consideran que debe caducar antes, pueden marcar una revisión con mayor frecuencia. Y si uno llego algo perjudicado a este trámite -por la edad u otras circunstancias – puede encontrarse con una negativa a la renovación.

undefined

A estas alturas no seremos nosotros los que te digamos lo que debes hacer. Ya eres mayorcito para saber cómo manejarte, sin embargo, si nos lo permites de ofrecemos algunas sugerencias para alargar al máximo el disfrute de tu gran pasión. Para la otra, ya tienes la pildorita azul.

Mantente activo

Practica algún tipo de ejercicio de manera habitual. Te ayudará a conservar las aptitudes necesarias para conducir durante más tiempo. Fuerza muscular, flexibilidad, reflejos...

Controlar la audición

Fundamental detectar los vehículos que se acercan, el ruido del motor y cualquier otra señal acústica del entorno. Antes de quedarte teniente, no tengas manías de emplear audífonos.

Examinar la vista

Problemas de visión nocturna, miopía, pérdida de agudeza visual… suelen ser habituales. Unas gafas pueden ser tu mejor aliado.

Cambiar de vehículo

Podría parecer una estupidez, pero tiene una explicación bien sencilla. Quizás ya no estés en condiciones de domar una RR, pero sí de conducir todavía una tranquila naked de 35 kW (47 CV), una bonita retro o incluso un cómodo scooter. No tienes porqué soltar de un día para otro el manillar.

Evitar problemas

A estas alturas, ¿para qué te vas a complicar la existencia? ¿Quién quiere viajar de noche, lloviendo y con niebla? Y si te cansas, pues tranquilamente paras, estiras las piernas y les das un respiro a la próstata.

Sobre la marcha, reduces algo la velocidad porque tus reflejos ya no son lo que eran y… listos, a seguir rodando unos años más.

Sin embargo, no está de más pensar que todo tiene un final y que nuestro viaje sobre dos ruedas llegará un día a la última parada y llegado el momento, siempre será mejor bajarse el sillín motu proprio, antes que un percance o un tercero nos obligue a aparcar definitivamente.

Mientras tanto y a pesar de que seamos abuelos al manillar, ¡gassss! y a vivir el momento.

undefined
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...