365 días para celebrar 50 años

El primero de estos actos fue una cena que tuvo lugar en Fundación Can Costa en la que, recordando la mítica cena en la que se gestó el nacimiento de la marca, se reunió de nuevo a los supervivientes del equipo inicial de la fábrica con los herederos de Francisco X. Bultó y algunos pilotos oficiales de la época.

Fue éste un encuentro totalmente privado que sirvió de homenaje a un grupo de personas que confiaron en un proyecto renovador y supieron llevarlo a lo más alto, logrando varios títulos mundiales.

COSAS QUE SEGURO QUE NO SABES DE BULTACO

El primer modelo fabricado por Bultaco fue la Tralla 101, una moto de carretera que gracias a sus éxitos deportivos alcanzó gran prestigio el año de su lanzamiento.

La Travesía dos Mares, entre San Sebastián y Cadaqués, o la Expedición al Himalaya son dos ejemplos de las muchas iniciativas en las que colaboró Bultaco.

Una visita del entonces príncipe, Juan Carlos, desembocó en la organización de una salida de iniciación a las motos de montaña en una finca de Madrid. Oriol Puig Bultó fue el encargado de llevarla a cabo, y recuerda en un libro “Bultaco, todo un Mito”, “lo bien que lo pasamos practicando técnicas de pilotaje en saltos, derrapaje y cambios de peso, y lo fácil que se adaptó a la moto de montaña”.

La primera participación de Bultaco en motocross tuvo lugar en Manresa en 1959. El piloto era Puig Bultó, y la moto, una Tralla 1001 de carretera modificada para la ocasión. Aquella experiencia animó a la marca a seguir el desarrollo de una moto específica, primero la Sherpa S y posteriormente la Pursang.

El estreno de la marca en unos ISDE se produjo en el año 1962 en Austria. El honor le correspondió de nuevo a Puig Bultó, quien compitió acompañado por José Sánchez. Ambos consiguieron acabar la prueba y las que serían las dos primeras medallas de oro españolas en unos ISDE.

La primera participación de Bultaco en los Seis Días de Escocia de Trial fue en 1963. La marca preparó dos motos con lo aprendido en Francia, y fueron Puig Bultó y Tom Ollerton, un piloto inglés de la época, quienes sometieron a prueba lo que podríamos denominar primer prototipo de la futura Sherpa T.

En 1962, Oriol Puig Bultó

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